El complicado final del partido entre Gremio y Botafogo dejó una de las imágenes más preocupantes del fin de semana en el Brasileirao: Erick Noriega abandonó el campo entre gestos de dolor, apoyado en muletas y con el tobillo inmovilizado, encendiendo todas las alarmas tanto en Brasil como en el Perú. El defensor, que venía sumando minutos importantes en su club y aparecía como alternativa firme en la Selección Peruana, quedó fuera de acción tras una jugada que paralizó a todo el estadio y generó un mar de dudas sobre la gravedad del golpe. Horas después, mientras la expectativa por un parte médico crecía, el jugador decidió romper su silencio.
La lesión que dejó al zaguero fuera del encuentro ocurrió en el segundo tiempo, cuando fue a disputar un balón dividido con Arthur Cabral. En una caída desafortunada, el atacante de Botafogo terminó impactando sobre la pierna del peruano, lo que provocó una torsión inmediata y un dolor que lo obligó a pedir asistencia de inmediato. Sus compañeros, alarmados por su reacción, pidieron el ingreso del cuerpo médico sin esperar un segundo más.
La situación se tornó aún más tensa al finalizar el encuentro. Noriega fue captado saliendo del Estadio Nilton Santos con muletas y una bota ortopédica, una imagen que rápidamente se viralizó en redes y que aumentó la preocupación de los hinchas. La incertidumbre creció porque, en un primer momento, se especuló con una posible fractura debido al fuerte impacto y a la poca capacidad de apoyo que mostraba el jugador.
A pesar del duro momento, Noriega decidió enviar un mensaje para tranquilizar a los hinchas y agradecer la preocupación mostrada desde que se conoció su lesión. El peruano utilizó sus redes sociales para compartir un breve pero contundente texto: “Quiero agradecer a todos por los lindos mensajes de apoyo que me mandaron, gracias a Dios no fue tan grave como parecía. Pronto estaré nuevamente en las canchas. Volveré mucho más fuerte”, escribió el defensor, mostrando una actitud positiva ante un escenario que podría haber sido mucho más complejo.

El mensaje fue bien recibido tanto en Brasil como en el Perú, especialmente porque en los últimos meses el defensor se había ganado un lugar en el equipo y era considerado una pieza clave para la línea defensiva que Gremio venía utilizando. Su ausencia obligará al comando técnico a rediseñar su esquema defensivo para los partidos restantes del Brasileirao, donde el club aún pelea por mantenerse en zona internacional.
La noticia también generó inquietud debido a su presencia en el proceso de recambio de la Selección Peruana. Noriega había sumado minutos en la última fecha FIFA y era uno de los nombres que Manuel Barreto tenía en consideración para los amistosos de final de año. Su lesión cambia completamente los planes y lo deja sin posibilidades de ser convocado en lo que resta del 2026.
Aunque el diagnóstico podría ser serio, el propio jugador dejó entrever que su objetivo es recuperarse con calma y proyectarse hacia la próxima temporada. Según los tiempos estimados, su retorno se daría recién en 2026, pero Noriega ha mostrado la determinación de apuntar más allá, pensando en llegar en plenitud para competir por un puesto la siguiente temporada.