Kylian Mbappé ha dado un golpe decisivo en su ya tensa relación con el París Saint-Germain (PSG). La Comisión Paritaria de Recursos de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) francesa ha fallado a favor del delantero del Real Madrid, ordenando al club parisino el pago de 55 millones de euros que, según él, le corresponden por salarios y primas impagadas de la última temporada. Esta victoria legal para ‘Kiki’ es la segunda que consigue en las instancias deportivas francesas; previamente, la Comisión Jurídica de la LFP ya le había dado la razón en esta disputa. Sin embargo, el PSG, en voz de uno de sus portavoces, ha señalado que no tienen intención de realizar este pago y que llevarán el caso hasta las últimas consecuencias legales.
La relación entre Mbappé y el PSG fue durante años una de las mejores, pero terminó desgastándose a raíz de desacuerdos económicos y malentendidos contractuales. El PSG alega que los 55 millones en disputa se basan en un acuerdo verbal al que ambas partes habrían llegado en el intento de mantener la armonía y garantizar la permanencia de Kylian en el primer equipo después de que el jugador rechazara una extensión de contrato para el tercer año.
Con este acuerdo como base, el PSG había retenido esa suma, argumentando que existía un compromiso de salida pactada del delantero que incluía un beneficio económico para el club. Sin embargo, los abogados de la hoy estrella del Real Madrid han defendido que ese trato es inválido y que el jugador ya cumplió con sus obligaciones, por lo que en el Parque de los Príncipes están legalmente obligado a pagarle la suma total.
La respuesta del PSG: “Una cuestión de buena fe y honradez”
Un portavoz del PSG no tardó en responder al fallo de la comisión, alegando que la decisión no supone una “victoria” para Mbappé y subrayando que el club hará todo lo posible para evitar el pago. Además, aseguró que esta situación se ha tornado inevitable debido a la negativa de Kylian a aceptar una conciliación y que, en caso de que continúe con su “mala fe” en este conflicto, el PSG no dudará en recurrir a los tribunales tradicionales, un proceso que, según el portavoz, podría durar “meses o incluso años” antes de llegar a una resolución final.
“Se trata de una cuestión de buena fe, de honradez, de defensa de los valores y de respeto a la institución parisina y a su afición, que es más importante que cualquier jugador”, agregó el portavoz, según reporta la Agencia EFE, en una clara alusión a que los intereses del club están por encima de los de cualquier futbolista, incluso de un jugador con la proyección mediática y futbolística de Mbappé.
El Inicio del final: la clausura de una relación rota
La tensión entre Mbappé y el PSG no es nueva. En 2022, el jugador firmó una renovación por dos años más un tercero opcional. Sin embargo, cuando el PSG comenzó la nueva temporada bajo la dirección de Luis Enrique, Mbappé ya había expresado su decisión de no activar la opción de ese tercer año. El club, en una postura tajante, dio un ultimátum al delantero: o renovaba su contrato o abandonaba el club durante el verano de 2023.
Como parte de esta presión, Mbappé fue separado temporalmente de la disciplina del primer equipo. Finalmente, las dos partes llegaron a un supuesto acuerdo para que el delantero regresara al plantel, comprometiéndose ambas a encontrar una salida ordenada que garantizara beneficios económicos para el PSG. Sin embargo, Mbappé afirma que este trato se limitaba a una solución temporal y que ya ha cumplido con su parte.