Hace 6 meses, en noviembre del 2017, Andrea Pirlo se retiró como jugador profesional tras dedicarle las últimas temporadas al fútbol de Estados Unidos. Sin embargo, ayer le dijo adiós formalmente al balompié en el estadio San Siro, luego de 23 años de magia en el evento, denominado “La Noche del Maestro”, donde se hicieron presentes destacados jugadores y entrenadores.
Este partido contó con la presencia de figuras de la talla de Ronaldinho, Francesco Totti, Carlos Tévez, Gianluigi Buffon, Alessandro Del Piero, Dida, Frankie Lampard entre otros.
“Doy las gracias a mis amigos y a todo el mundo que ha venido al estadio a disfrutar de una noche de diversión, deporte y caridad”, dijo el jugador de 39 años al público presente.
Al final de un partido de fútbol-7, en el que el exgoleador del Milan y Juventus Filippo Inzaghi anotó una tripleta, Pirlo -que jugó para el equipo blanco- dejó paso a su hijo de 15 años Nicolo, que juega en las categorías inferiores de la Juventus.
“Se divierte y está feliz. Debe ser feliz para jugar al fútbol, es la mejor cosa en el mundo... Ya se verá en el futuro”, añadió el jugador cuando le preguntaron si su hijo podría tener su misma carrera de éxitos.
FUTURO INCIERTO
Tras colgar las botas, Pirlo podría entrar a formar parte de la directiva de la Federación Italiana de Fútbol. “Necesito tiempo para pensarlo. Acabo de dejarlo, no echo de menos la cancha. En el futuro podría ser entrenador”, dijo.
Las clases de Andrea Pirlo llegaron a su fin. El fútbol echará de menos al ‘Maestro’.