La mesa está servida
Todo listo para que Novak Djokovic y Nick Kyrgios salten al centenario Centre Court del All England Club. ¿Habrá un rey en continuado o una gran sorpresa?
Ojo que te quiebra...
Djokovic es el segundo tenista con más quiebres de servicio conseguido. Llegó hasta la final con 32, solo por detrás de su vencido en las semis, el británico Cameron Norrie. Kyrgios, por su parte, quebró a sus rivales en 19 oportunidades.
El rey del ace
Kyrgios es el jugador que lleva más aces en lo que va del torneo. Suma 120 y tiene toda la final por delante para seguir sacando ventaja. Será una de sus armas para el duelo contra Djokovic, que aparece octavo en este ranking con "apenas" 50 saques sin respuesta. El saque más veloz del australiano fue a 220 kilómetros por hora -no es el más rápido porque ese honor le quedó a John Isner que soltó un martillazo a 222 km/h).
Te hago una apuesta...
Djokovic y Kyrgios, acordaron reencontrarse para cenar en un restaurante y el vencedor pagará la cuenta, según un intercambio de mensajes entre ambos en Instagram antes del epílogo del torneo.
El australiano y el serbio, que busca un séptimo título en la hierba inglesa y un 21º Grand Slam, no han estado siempre en tan buenos términos: "Te han hecho falta cinco años para decir algo bueno sobre mí", bromeó Djokovic en la red social.
"Es verdad, pero te defendí cuando importaba", respondió Kyrgios, uno de los pocos jugadores en haber apoyado públicamente a "Nole" cuando no quiso vacunarse y fue por tanto excluido del Open de Australia, a principios de 2022, tras dos semanas de polémica.
"Lo hiciste y lo aprecio", replicó Djokovic. "¿Entonces somos amigos ahora?", devolvió el australiano. "Si me invitas a beber algo o a cenar, acepto. Y el vencedor (de la final) pagará", concluyó el serbio.
"Trato hecho. Vayamos a un club nocturno y volvámonos locos", propuso Kyrgios, en una posible alusión a una foto de Djokovic en Belgrado, con el torso desnudo, en una discoteca en junio de 2020, en plena pandemia del coronavirus.
Kyrgios había entonces criticado a Djokovic por haber organizado una serie de torneos en Serbia, el Adria Tour, pese a la pandemia, y le había acusado de "falta de humildad". Pero después lo apoyó, ante la sorpresa general, durante el culebrón concluido con su expulsión de Australia.
Un historial particular
Djokovic y Kyrgios solo se enfrentaron en dos ocasiones, en cuartos de final del torneo de Acapulco en 2017 y tres semanas más tarde en octavos de final de Indian Wells. En ambas ganó el cáustico australiano en rocosos partidos.
"Nunca antes le he ganado un set. Espero que esta vez sea diferente. Voy a jugar otra final en Wimbledon, espero que la experiencia juegue en mi favor", deseó el serbio el viernes.
La oportunidad de Kyrgios
Kyrgios, 40º tenista del mundo, que nunca ha disputado una final de Grand Slam, pasó automáticamente a la final cuando el jueves Nadal anunció que se retiraba debido a una lesión en la zona abdominal, poniendo fin a su sueño de sumar victorias en los cuatro grandes torneos en el mismo año.
El australiano, de 27 años, llega así más descansado pero con menos práctica.
En los últimos días reconoció que la excitación le estaba impidiendo dormir bien y que planeaba realizar un duro entrenamiento antes de la final para paliar la falta de partido.
Mientras tanto, el sábado publicó un mensaje en las redes sociales recordando su trayectoria, desde que era un niño con sobrepeso que jugaba en desgastados terrenos de tenis municipales en Canberra.
"Creo que es un mensaje fuerte para cualquier chico que dude de sí mismo. Sólo tienen que seguir adelante. Miren esa foto, me parezco literalmente a Manny de 'Modern Family'", escribió, refiriéndose a la exitosa serie de televisión estadounidense.
"Creo que, sinceramente, es una inspiración para cualquier chico que haya sido marginado o que esté rodeado de titulares negativos o que haya sido derribado desde muchos ángulos diferentes", agregó.
El presentimiento de Djokovic
"Una cosa es segura, va a haber fuegos artificiales emocionales", aseguró el serbio al meterse en su 32ª final de un Grand Slam y octava de Wimbledon. De las anteriores, solo perdió en 2013, contra el escocés Andy Murray, que contó con la ventaja de la localía y el apoyo de un exultante público británico. El gran torneo sobre césped no se celebró en 2020 debido a la pandemia, y Djokovic no pierde en el All England Club londinense desde cayó en cuartos de final en 2017. Sumando cuatro Wimbledon consecutivos, el campeón serbio busca entrar en el exclusivo club formado por Bjorn Borg, Pete Sampras y Roger Federer. Y obtener su 21º título de Grand Slam, persiguiendo a Rafa Nadal que tras ganar este año el Abierto de Australia y su 14º Roland Garros tiene ya 22 grandes trofeos. Este será además el último gran torneo del año para Djokovic, ya que sin vacunarse contra el Covid-19 no podrá viajar a Estados Unidos para disputar el US Open.
Novak Djokovic, vigente campeón, y el controvertido Nick Kyrgios, número 40 del mundo, saltarán a la pista central de Wimbledon a las 10 del domingo en la Argentina para disputar la final masculina. Podrás seguirlo en vivo a través de este relato en Clarín.