El oro estuvo muy cerca demasiado cerca, pero se le fue en los últimos metros. Guadalupe González se quedó a unos segundos de disfrutar la mayor de las emociones que se pueden tener en el deporte, sin embargo, la plata fue el premio a todo el trabajo que hizo durante cuatro años. Pero eso no es suficiente, por ello su carrera no se detiene.
Después de ganar la plata en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, la marchista enfrentó una incógnita sobre el futuro de su carrera deportiva: ¿seguir en esta disciplina o dejarla?
La respuesta la obtuvo con el paso de los días, tras platicarlo con su familia, luego de analizarlo con las personas ligadas a su carrera deportiva y de meditarlo. Después de eso, la mexiquense finalmente decidió continuar por otro ciclo olímpico para disfrutar el momento de gloria que sintió cerca pero que no fue para ella, sino para la china Hong Liu.
"Sí, voy por otro ciclo olímpico", así de contundente es Lupita. "Quiero volver a intentarlo, la verdad, me quedé muy cerca y me siento capaz de lograrlo ahora en Tokio 2020 y voy a trabajar más fuerte para que se haga realidad".
Pero eso no es todo. Antes hay otras cosas que también quiere disfrutar.
"Previo está el Mundial del siguiente año, el cual es un evento que me falta y que me gustaría vivirlo y donde lucharé por algo. También me falta competir en unos Juegos Centroamericanos y espero estar ahí, con ello ya podría decir que he estado en todas las competencias internacionales", declaró González.
Ya definido el futuro de la andarina, ahora viene un proceso de adaptación a la nueva forma en que debe prepararse. La subcampeona olímpica trabajará por un momento sin entrenador, aunque será auxiliada por Esteban Santos, un profesor que apoyó a Juan Hernández durante un tiempo.
"Estoy tranquila y trabajando en mi preparación general aunque todavía no tengo definido a un entrenador. Estoy más tranquila al hablar con Carlos Padilla (presidente del Comité Olímpico Mexicano) y con la gente de Conade, a quienes les indiqué que no me precipitaré en ello", explicó.
"He cerrado un ciclo con el profesor Juan Hernández, cumplimos los dos con nuestros planes y ahora tengo el objetivo de llegar a Tokio y el profesor se enfocará en tres atletas de 50 km, le debe de ir muy bien. Es un hueco que tengo todavía de no seguir con él, por ello es que no he tomado una decisión, la tomaré después de la Copa Panamericana. Ahora estoy con mi cuerpo multidisciplinario, un poco con lo aprendido con el profesor Juan y estoy trabajando con un compañero mío".
González mencionó que continuará con el plan del ciclo pasado, donde participaba en pocas competencias para tener buen rendimiento con resultados destacados.
"Sí seguiré con el mismo plan de pocas competencias y esa decisión se tomó porque la lesión que tengo en la espalda, en los lumbares, no me permite tener más participación. Debo cuidar mucho esa parte y ser más selectiva en los eventos como lo hacía con el profesor Juan, fue muy bueno su planteamiento y trataré de mantenerme con ese programa", resaltó.
LA AGENDA CASI DEFINIDA
En 2017, la andarina participará en marzo en un Challenge que se realizará en Ciudad Juárez, en la Copa Panamericana en mayo en Perú y en el Mundial de Atletismo de agosto en Inglaterra.
"El mayor reto sería el Mundial de Londres y para ello debo pasar varios filtros, como el Challenge y la Copa Panamericana, pero sí quisiera pelear algo en la justa mundialista porque es un evento muy importante donde estarán las mismas competidoras de los Juegos Olímpicos y quisiera volver a pelear algo ahí. El objetivo es la medalla y una vez más tendría la oportunidad de competir contra las chinas. Espero estar a la altura y regresar con un triunfo", indicó.
En el ciclo anterior, González tuvo resultados de ensueño después de lograr resultados destacados como el oro en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, el título en la Copa del Mundo de marcha realizada en Roma este año y la plata de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
"Sin lugar a dudas, es un año muy redondo y muy completo. Se cumplió con todos los compromisos planeados y estoy muy satisfecha con estos resultados. Por el momento, estamos controlando con terapias la lesión en la espalda porque no quiero que se haga cirugía porque hay riesgos. Ahora no me molesta y he estado fortaleciendo para no llegar al extremo de la cirugía", señaló la atleta de 27 años de edad.