El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha firmado dos proyectos de ley que refuerzan las sanciones contra los inmigrantes indocumentados en el estado. Las leyes SB 2C y SB 4C están diseñadas para dificultar la vida de los inmigrantes, tanto aquellos que intentan ingresar a Florida sin documentos como de los que ya residen en el estado. A continuación, te contamos más detalles.
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¿Cuáles son las nuevas leyes migratorias que firmó Ron DeSantis?
La ley SB 2C criminaliza diversas acciones relacionadas con los inmigrantes indocumentados y prohíbe la emisión de licencias de conducir e identificaciones para estas personas. Además, crea una nueva Junta Estatal de Aplicación de la Ley de Inmigración que se encargará de coordinar y asegurar el cumplimiento de las leyes migratorias de manera más estricta.
Por otro lado, la ley SB 4C establece penas más severas para los inmigrantes que intenten ingresar a Florida tras haber sido deportados o excluidos de los Estados Unidos. Esta ley también introduce la pena de muerte obligatoria para delitos graves cometidos por extranjeros no autorizados, como el asesinato en primer grado o la violación infantil. Estas medidas han sido vistas como un endurecimiento sin precedentes de las políticas migratorias en Florida.
¿Cómo afectan estas leyes?
Las leyes también afectan a los inmigrantes que ya viven en el estado, ya que se elimina la matrícula estatal para estudiantes indocumentados y se imponen sanciones más duras por delitos cometidos por personas sin estatus legal. DeSantis ha destacado que florida es ahora uno de los estados con las leyes migratorias más rigurosas en el país.
Además, estas leyes refuerzan la colaboración entre las autoridades locales y federales, permitiendo una aplicación más estricta de las normativas migratorias, especialmente durante la presidencia de Donald Trump.
Las nuevas normativas han generado una gran preocupación en la comunidad inmigrante, que ve en estas medidas un peligro para su estabilidad y seguridad en el estado. Sin embargo, DeSantis defiende que estas leyes son necesarias para proteger la seguridad de los residentes legales de Florida.