El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha reactivado el programa 287(g) de Task Force en al menos siete estados de Estados Unidos. La medida devuelve a las autoridades locales un rol activo en la detención de inmigrantes y ha generado preocupación entre activistas y comunidades migrantes, que temen un incremento en los casos de perfilamiento racial y detenciones arbitrarias.
Esta iniciativa, que había sido suspendida en 2012 por denuncias de abusos y discriminación, permite que agentes estatales y locales trabajen en conjunto con ICE para reforzar el control migratorio en sus jurisdicciones. En esta nota te comentamos más sobre esta drástica medida migratoria.

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¿Cómo opera Task Force?
Según El Comercio, el programa 287(g) funciona mediante acuerdos entre ICE y agencias locales, otorgando a los oficiales estatales la facultad de interrogar a personas sobre su estatus migratorio, realizar detenciones sin orden judicial y trasladar a los arrestados a instalaciones federales. Además, pueden emitir órdenes de detención y ejecutar traslados de los detenidos.
Una de las características más controversiales del programa es que permite a las fuerzas del orden estatales y locales aplicar medidas migratorias como parte de sus operativos diarios. Esto significa que cualquier control de tráfico o patrullaje rutinario puede convertirse en un punto de detención para inmigrantes sin documentos.
Los estados donde ICE activará el programa
Desde enero de 2025, Florida, Texas, Idaho, Kansas, Nevada y Oklahoma han comenzado a implementar la medida. La lista incluye mayormente estados de inclinación conservadora, donde las políticas de control migratorio han sido una prioridad gubernamental.
Florida ha asumido un papel protagónico en la reinstalación del 287(g), incorporando diversas agencias estatales, como el Departamento de Vehículos y el Departamento de Aplicación de la Ley. Con base en los informes de Univision, oficinas de alguaciles en condados como Collier y Lee también han expresado su intención de unirse al programa.
Mientras que algunos sectores ven en esta iniciativa una estrategia para fortalecer la seguridad pública, organizaciones defensoras de los derechos civiles alertan sobre el riesgo de que se repitan prácticas de discriminación racial y persecución arbitraria.
Reactivación de Task Force: ¿Seguridad o discriminación?
La reactivación del programa Task Force ha dividido opiniones. Mientras las autoridades que lo respaldan aseguran que contribuirá a mejorar la seguridad pública, organizaciones de derechos humanos insisten en que esta política pone en riesgo a miles de inmigrantes, quienes podrían ser detenidos y deportados sin un debido proceso.
Con su implementación en marcha, la gran interrogante es si este relanzamiento corregirá los errores del pasado o si volverá a convertirse en un mecanismo de persecución contra las comunidades inmigrantes.