El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha decidido revocar la licencia que permitía a Chevron operar en Venezuela, argumentando que el gobierno de Nicolás Maduro no ha cumplido con las condiciones democráticas acordadas ni ha acelerado la repatriación de migrantes deportados desde EE.UU.
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Esta medida, que entrará en vigor el 1 de marzo, pone fin a una concesión otorgada en noviembre de 2022 durante la administración de Joe Biden, la cual permitía a Chevron extraer y exportar petróleo venezolano a cambio de avances hacia elecciones democráticas en el país sudamericano.
¿Qué dijo Trump sobre los inmigrantes venezolanos?
"Por la presente, revertimos las concesiones que el corrupto Joe Biden le dio a Nicolás Maduro, de Venezuela, sobre el acuerdo de transacción petrolera, con fecha del 26 de noviembre de 2022, y que también tiene que ver con las condiciones electorales dentro de Venezuela, que no han sido cumplidas por el régimen de Maduro", señaló el mandatario de EE. UU. en un comunicado de la red Truth Social.
"Además, el régimen no ha estado transportando a los criminales violentos que enviaron a nuestro país (el bueno y viejo Estados Unidos) de regreso a Venezuela al ritmo rápido que habían acordado. Por lo tanto, ordeno que el ineficaz e incumplido 'Acuerdo de Concesión' de Biden se rescinda a partir de la opción de renovación del 1 de marzo", acotó.
Impacto en la industria petrolera venezolana
La revocación de la licencia de Chevron representa un golpe significativo para la economía de Venezuela, ya que la empresa estadounidense gestionaba aproximadamente una cuarta parte de la producción petrolera del país. Sin la participación de Chevron, se anticipa una disminución considerable en la producción de crudo, lo que podría agravar la ya precaria situación económica venezolana. Además, la ausencia de Chevron podría abrir la puerta a una mayor influencia de compañías de países como China y Rusia en el sector energético venezolano.
Reacciones internacionales y políticas
La decisión de Trump ha generado diversas reacciones en la comunidad internacional. La vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, calificó la medida como "dañina e inexplicable", sugiriendo que decisiones de este tipo han contribuido a la migración masiva desde Venezuela.
Por otro lado, líderes de la oposición venezolana, como María Corina Machado, consideran que la cancelación de la licencia demuestra el apoyo de Trump al pueblo venezolano y a la democracia en el país.
Esta acción también refleja un cambio en la política exterior de Estados Unidos hacia Venezuela. Durante la administración Biden, se otorgaron ciertas concesiones con la esperanza de promover elecciones libres y justas. Sin embargo, ante la percepción de incumplimiento por parte del gobierno de Maduro, la administración Trump ha optado por retomar una postura de "máxima presión", revirtiendo acuerdos anteriores y reforzando las sanciones económicas.
Decisión de Trump afecta economía en Venezuela
Chevron, por su parte, ha expresado que está evaluando las implicaciones de esta decisión en sus operaciones. La empresa ha operado en Venezuela desde la década de 1920 y, hasta la fecha, mantenía asociaciones con la estatal PDVSA para la extracción de petróleo. La revocación de la licencia no solo afecta a Chevron, sino también a la economía venezolana, que depende en gran medida de los ingresos petroleros para su sustento.
Cabe mencionar que, la revocación de la licencia de Chevron para operar en Venezuela por parte del presidente Trump marca un punto de inflexión en las relaciones entre ambos países. Esta medida busca presionar al gobierno de Maduro para que cumpla con los compromisos democráticos y agilice la repatriación de migrantes, pero también podría tener repercusiones económicas y políticas significativas tanto para Venezuela como para las empresas extranjeras involucradas en su sector energético.