En un reciente comunicado, el secretario de Estado del país norteamericano, Marco Rubio, dio a conocer los detalles de cuáles serán los próximos pasos del gobierno nacional, liderado por Donald Trump, con la finalidad de erradicar la inmigración ilegal de Estados Unidos. Esto debido a que es una de las posturas que el presidente de Estado desea abordar con más ímpetu desde que tomó el poder de la Casa Blanca.
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La nueva política contra la inmigración de Estados Unidos
En relación a lo señalado por las autoridades en Estados Unidos, lo primero que debe abordarse a nivel internacional es la erradicación de la migración masiva y la protección de las fronteras. Como consecuencia, Rubio señaló que la medida migratoria debe responder a tres preguntas claves al enfrentarse a inmigrantes:
- ¿Hace que Estados Unidos sea más seguro?
- ¿Hace a Estados Unidos más fuerte?
- ¿Hace que Estados Unidos sea más próspero?
Siendo así, en materia de inmigración, dio a entender que el Departamento de Estado eliminará todo tipo de actividad que fomente la migración masiva. Aseguró, además, que las relaciones diplomáticas de Estados Unidos con otros países, sobre todo con aquellos pertenecientes al hemisferio occidental, se centrarán en asegurar las fronteras del país norteamericano, detener la migración ilegal y negociar el envío de inmigrantes ilegales a sus lugares de origen.
El comunicado del Departamento de Estado para los otros países
Con base en las prioridades del Departamento de Estado, la cuenta oficial de este organismo estadounidense en la red social X reafirmó sus posturas, enviando un mensaje a los gobiernos extranjeros. "Somos firmes en nuestro compromiso de poner fin a la inmigración ilegal y reforzar la seguridad fronteriza de Estados Unidos", detalló. "Es responsabilidad de cada nación recuperar de manera seria y expedita a sus ciudadanos que se encuentran ilegalmente en Estados Unidos".