Los inmigrantes no le temen a Donald Trump. A partir del 2 de enero de 2025, una nueva caravana de inmigrantes inició su recorrido desde la ciudad de Tapachula, al sur de México, con la intención de llegar a la frontera con Estados Unidos. Dicho movimiento es la consecuencia de la pobreza y falta de oportunidades en sus países de origen.
Integrada por inmigrantes de Centroamérica y el Caribe, así como de Venezuela y Haití, la caravana avanza a paso firme por el territorio mexicano, enfrentándose a un camino repleto de dificultades. Las condiciones climáticas extremas, la escasez de alimentos y los controles establecidos por las autoridades migratorias juegan en su contra. ¿Cuáles son sus expectativas? ¿Cómo inició el trayecto? En esta nota te brindamos todos los detalles al respecto.
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El objetivo de la caravana de inmigrantes hacia Estados Unidos
El grupo partió de Tapachula, como se indicó en líneas anteriores. En aquel lugar, muchos inmigrantes habían permanecido por meses a la espera de los permisos migratorios que les permitieran transitar legalmente por México. No obstante, ya que no se dio una respuesta favorable, decidieron organizar una caravana y simplemente avanzar. Argumentaron, además, que moverse de esa forma les ofrece mayor seguridad ante asaltos o extorsiones.
El objetivo principal es llegar a Estados Unidos. Sin embargo, algunas personas manifestaron su deseo de quedarse en la Ciudad de México con el fin de contar con facilidades de empleo y acceder a servicios básicos. Ante esta situación, las autoridades mexicanas reforzaron las vigilancias en las rutas y han ofrecido asistencia humanitaria limitada en puntos específicos del trayecto.
Los inmigrantes desean encontrar un mejor futuro en Estados Unidos
Esta caravana es una de las primeras del año 2025 y una de las décimas realizadas durante la presidencia de Claudia Sheinbaum. A pesar de que los inmigrantes se pintan de esperanza, enfrentándose a diversos desafíos por cumplir el sueño americano, dicha medida evidencia la necesidad de solucionar una crisis migratoria latente.
Por su parte, Donald Trump no planea mitigar el impacto de las deportaciones masivas. El jueves 2 de enero, más de 500 guatemaltecos fueron detenidos en Estados Unidos, iniciando sus deportaciones. Ante este paradigma, la presidenta de México, Claudia Sheibaum, informó que el país azteca inició diálogos con otros países de Latinoamérica para que acepten a sus deportados en lugar de que sean enviados a México.