Mi sobrino Jefferson Agustín Farfán Guadalupe acaba de inaugurar su primer mall KM40, tema que generó tendencia y mucha repercusión positiva en el ambiente ya que trasladó su éxito de las canchas de fútbol a los negocios.
Sin duda que, como tío, siento una gran admiración, orgullo y alegría por seguir viendo sus triunfos y en especial los de mi hermana Charo Guadalupe, que continua cosechando los logros del hijo que formó.
Jefferson está muy agradecido con su madre. En su discurso de presentación tuvo estas palabras para ella. “Mamá, tu amor, sacrificio y sabiduría me han guiado a lo largo de mi vida. Sin ti, nada de esto sería posible. Gracias por ser mi inspiración y mi fuerza. Hoy es un día muy especial para mí, un día lleno de emoción y gratitud. No sólo porque estamos inaugurando este centro comercial, sino porque puedo compartir este logro con las personas más importantes de mi vida: mi madre y mis hijos”; fueron las conmovedoras palabras que representan la gratitud de un hijo para con su madre.
El reconocimiento es genuino y mutuo entre ellos y me sumo a ese ramillete de agradecimientos porque se lo merecen. La familia disfruta de cada momento, de esta gran realidad, como parte de ellos. Seguir viendo sus logros, nos llena de orgullo.
JEFFERSON ES UN TOCADO CON LA GRACIA DE MAMÁ
En un momento de reflexión, pensando en la vida y lo que viene consiguiendo mi sobrino Jefferson Agustín Farfán Guadalupe, un día me pregunté por qué mi hermana le puso el nombre de Jefferson a su hijo. Sabía que su segundo nombre Agustín, era en honor al abuelo paterno.
Entonces, agarré y llamé a mi hermana para consultarle sobre cómo se le ocurrió ponerle Jefferson o en todo caso, cómo nació elegir ese nombre y me encontré con una historia muy interesante.
Fue muy emocionante y grato enterarme que mi hermana Charo le pone el nombre de Jefferson en honor a Thomas Jefferson, quien fue el tercer presidente de Estados Unidos entre 1801 y 1809. Mi hermana me cuenta que él es reconocido por sus ideales para acabar con la esclavitud, lucha que varios años después se lograría en el gobierno del presidente Abraham Lincoln.
Esa es la historia que da el nacimiento del nombre de mi sobrino Jefferson y quizás más de uno pensó que su nombre se debía a un exfutbolista.
Nos leemos al próximo lunes.