La victoria del FC Barcelona sobre el Napoli en el encuentro de vuelta de los octavos de final de la Champions League, por 3-1, asegurando su avance a cuartos, fue trascendental por varias razones. Primero, permitió al equipo seguir en competencia y mantener viva la aspiración de conquistar la ansiada Orejona. Segundo, aseguró la estabilidad del conjunto al confirmar la continuidad de Xavi Hernández como entrenador, cuya posición dependía en gran medida de este resultado. Tercero, reforzó las posibilidades del Barça de participar en el próximo Mundial de Clubes, que se celebrará en Estados Unidos entre junio y julio de 2025, y que reunirá a 32 equipos.
En 2019, la FIFA hizo público el cambio para el Mundial de Clubes: se estableció un nuevo formato que se celebraría cada 4 años, con la presencia de 32 equipos. Esta nueva edición incluiría a los campeones de la Liga de Campeones y la Copa Libertadores entre 2021 y 2024, así como varios clubes europeos destacados por su rendimiento deportivo.