El defensa Matías Aguirregaray reveló que se enteró por Instagram de su salida de Peñarol, apuntó como un error los constantes cambios de entrenador, y compartió el manual que el club quiere instrumentar para el plantel aduciendo que: “El jugador de Peñarol no puede andar en discotecas”.
En una nota con el programa Minuto 1 de Carve Deportiva, Aguirregaray comentó cómo se enteró que no seguía en Peñarol: “El 24 de diciembre abrí el Instagram y me enteré de que no iba a renovar. Yo estaba en el campo y no agarraba señal y el 24, cuando lo abrí, tenía esa publicación donde me etiquetaron. Me golpeó un poco la noticia. Fueron días duros porque la intención era seguir en Peñarol. Es la primera vez que me toca irme del club sin haber conseguido el objetivo y eso duele. Uno siempre quiere revancha, pero no la voy a poder tener”.
A la hora de analizar las razones por las cuales Peñarol perdió el campeonato, el Vasquito comentó: “Fue fuerte no ganar el campeonato, fue un año raro, complicado, con muchos cambios de entrenadores. Yo lo dije en el grupo que teníamos con los jugadores: nosotros veníamos bien con Darío, y cuando se fue, el grupo lo sintió. Es la verdad. Porque a veces uno viene mal en el campeonato y el cambio de DT te levanta, pero en este caso nos bajoneó mucho más de lo que nos levantó. Hubo muchos cambios, tuvimos tres entrenadores, y eso complica porque los entrenadores llegan, quieren cambiar un poco, poner otros jugadores, y eso afecta”.
Aguirregaray reafirmó el concepto de que, antes de la decisión del cambio de entrenador, el equipo estaba bien con Darío Rodríguez. “Yo con Darío estoy agradecido porque fue el que me dio confianza, muchas oportunidades, los otros también, pero con Darío fue diferente. Nosotros no veníamos mal como para cambiar de entrenador y nos golpeó mucho. Cuando Darío llegó yo era criticado y estaba más afuera que adentro, pero me brindó confianza. Luego llegó Diego (Aguirre) y tuve pocos minutos, jugué un partido de titular”.
Discotecas
En la nota el Vasquito Aguirregaray apuntó a lo lejos que está el club a nivel internacional y reveló que Peñarol no tiene las condiciones de infraestructura para apuntar más alto: “Por supuesto que nosotros fallamos y fallamos en la Copa Sudamericana. Hicimos un gran Apertura con Alfredo (Arias, el primer entrenador del año) pero la Copa nos complicó. Peñarol hoy en día está un poco lejos. La gente se ilusiona, pero nosotros somos más realistas y sabemos que estamos lejos. Esa Sudamericana nos complicó y nosotros (los jugadores) fuimos los culpables de la salida de Alfredo. Yo nunca dije de conseguir un objetivo internacional porque sé que estoy lejos, en lo personal me doy cuenta de que estamos un poco distantes a nivel internacional”.
El jugador expresó que en su paso por Estudiantes de La Plata comprobó que en Argentina tienen otras condiciones de trabajo y reveló que Peñarol tenía carencias hasta a nivel sanitario.
Justamente cuando fue consultado por el cambio que existió en la sanidad del club, Aguirregaray comentó: “Nosotros teníamos profesionales muy buenos dentro del club, pero no teníamos recursos, las condiciones, el club no tenía los materiales que se debían tener”.
Posteriormente se le preguntó por el manual de conducta que pretende instrumentar Peñarol con sus jugadores. “Está perfecto, es como debe ser. El jugador de Peñarol no puede andar en discotecas, no puede salir de noche o estar mal de peso, o ir a atenderse a otro lado si tenés las posibilidades en el club”, respondió y apuntó que no sabía si esto obedecía a alguna situación vivida con alguno de sus compañeros en la pasada temporada.
Aguirregaray reconoció que Liverpool ganó bien el Campeonato Uruguayo y concluyó revelando que le sorprendió que, ni el presidente, ni el técnico de Peñarol, lo llamaran para comunicarle la noticia de que no seguía en el club.
“No hablé ni con Ruglio ni con Aguirre luego de la salida. No voy a decir que me da lo mismo, pero bueno, pensé que luego de tantos años y como en el último tiempo hablaba mucho con Nacho Ruglio, me iban a llamar. Creyeron que la mejor forma era no hacerlo y no pasa nada”.