Aquella fría noche del domingo 12 de junio, la selección peruana enfrentó a Brasil por la última fecha de la fase de grupos de la Copa América Centenario 2016. Raúl Ruidíaz, con la ayuda de su mano, otorgó la victoria a Perú sobre el Scratch y, de paso, también lo eliminó de la competencia.
La jugada, repetida incontables veces por la televisión nacional, es ya conocida. Andy Polo recupera un mal rechazo de la defensa brasileña. Juega una pared con Paolo Guerrero y empieza la arremetida por la banda derecha.
Traslada hasta el fondo del campo brasileño y saca un pase centro al área chica. Raúl Ruidíaz se anticipa al portero Alisson y marca el primero y único tanto del duelo. La algarabía de la selección peruana es amortiguada por el reclamo de los brasileños.
Tres jugadores del 'Scratch' reclaman al árbitro la mano de Raúl Ruidíaz. El juez conversa con el línea y, tras varios minutos, presiones y argumentos de jugadores de ambas selecciones, decreta válido el gol de la selección peruana.