Por lo general, solemos creer que Perú tan solo tuvo un enfrentamiento con Chile en la Guerra del Pacífico, pero lo cierto es que ocurrió en dos ocasiones, donde la primera tuvo lugar décadas antes de la guerra de 1879 y HOY conocerás porqué sucedió esto.
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La Guerra Civil de 1835
En 1835 Perú estaba en guerra civil entre los caudillos Pedro Pablo Bermúdez y Agustín Gamarra contra Luis José de Orbegoso y Felipe Salaverry, donde los primeros se revelaron contra el gobierno de Orbegoso.
Tras una serie de conjuras, Andrés de Santa Cruz, presidente de Bolivia, se decanta por apoyar a Orbegoso con lo que dio inicio la guerra civil, pero en medio del conflicto sería Santa Cruz quien los derrota con un enorme contingente de tropas bolivianas.
Estos forzaron la huida de Gamarra, pero Salaverry se llevó la peor parte más adelante. Al darse cuenta que Orbegoso no era un líder fuerte, el mandatario altiplánico comenzó a verse seducido por unir ambas naciones, pero para ello necesitaba acabar con la oposición.
Por ello, con Gamarra desaparecido, solo debía hacerse cargo de Salaverry, quien tras ser vencido es ejecutado en Arequipa.
El nacimiento de la Confederación Perú-Boliviana (1836-1839)
Ante esto nace la Confederación Perú-Boliviana en 1936, donde Bolivia se mantuvo integra, pero el Perú fue dividido en dos estados, el Estado Nor Peruano y el Estado Sud Peruano, donde el primero era contraria a Bolivia mientras la segunda no.
El Nor Peruano lo integraban: La Libertad, Huaylas, Amazonas, Junín y Lima; mientras que el Sud Peruano: Cusco, Ayacucho, Puno, Arequipa y Litoral.
Santa Cruz recibe poderes amplios para dirigir este Estado siendo nombrado Protector Vitalicio, además de poder reelegirse por 10 años. El boliviano era amado en Bolivia y el sur peruano, pero en el norte era, literalmente, odiado.
Es aquí donde entra a tallar Chile, quien ya veía en este estado una verdadera amenaza a sus intereses. Pero las relaciones con el país sureño ya eran sensibles desde finales de la década del 1820, cuando el Perú aumentó impuestos a los productos extranjeros para priorizar el desarrollo de la industria local.
La misión restauradora y la ocupación de Lima en 1838
Ante esto, aparece la figura del ministro chileno Diego Portales quien se propuso el final de la Confederación, pues veía una amenaza severa para la estabilidad chilena, por lo que se emprende toda una campaña para tumbarse este supra estado, al cual se suma Argentina, pero de forma muy tibia.
Tras esto, en 19837 se emprende la primera campaña restauradora conformada por el ejército chileno con tropas peruanas opuestas a Santa Cruz, comandada por Manuel Blanco Encalada, la cual fue un fracaso, regresando a Santiago.
Meses después, Chile vuelve a declarar la guerra a la Confederación Perú-Boliviana, esta vez encabezada por Manuel Bulnes Prieto. Ante esto, Luis José Orbegoso, presidente del Estado Nor-Peruano declara la independencia del mismo, pero los restauradores la invadieron entrando por Ancón.
Por ello, el 21 de agosto 1838, tuvo lugar la Batalla de Portada de Guías donde las fuerzas nor peruanas perdieron, permitiendo que el ejército restaurador ocupe Lima por primera vez (la segunda tendría lugar 17 de enero de 1881).
El final de la Confederación Perú-Boliviana
En 1839 tendría lugar otra victoria crucial en el Combate de Casma, pero la estocada final tendría sucedería el 20 de enero de 1839 con la Batalla de Yungay, donde los ejércitos confederados de Santa Cruz serían aplastados de forma definitiva.
Ante esto, el 25 de agosto de 1839, Agustín Gamarra (proclamado presidente provisional del Perú el 15 de agosto por el Congreso reunido en Huancayo) proclamó, oficialmente, el fin de la Confederación Perú-Boliviana, además de la abolición de los estados Nor y Sud peruanos.
Vale mencionar que entre los militares peruanos que integraron el ejército restaurador destacan nombres importantes en la historia como: Ramón Castilla (futuro presidente hasta en dos ocasiones), Juan Francisco de Vidal, Juan Crisóstomo Torrico y Juan Bautista Eléspuru.