A Alianza no solo le bastó con regalarle 60 minutos a Jeriel De Santis en el campo de juego, también le otorgó una falta frente al arco que Kenyi Cabrera transformó en gol para la victoria de Melgar, que deja a los blanquiazules ya casi sin opciones para el Apertura.
MIRA: Corazón Alianza Lima, el club que se hizo campeón desde el latido de hincha de cada una de sus jugadoras | OPINIÓN
Y sufre Alianza porque se ve lejos de lo líderes. Y vale decir que el Clausura inicia de cero, pero continúa la suma en la tabla acumulada y los íntimos ya están rezagados. En el Apertura Melgar le arrebató el tercer lugar y a falta de que Cristal juegue este lunes ante Vallejo, están a siete de los celestes y a 9 de Universitario, que ayer goleó 6-0 a Comerciantes Unidos.
Le toca pensar en el Clausura, porque en este Apertura no supo hacerle frente ni a los rivales directos ni a los de altura. Perdió de local el clásico ante Universitario (1-0), cayó ante Cristal (remontada celeste de 2-1) y ahora ante Melgar. Y si de robar puntos fuera de casa se trata, solo lo hizo ante Alianza Atlético, Unión Comercio y Mannucci. Cuando le tocó subir a la altura, cayó ante ADT (Tarma), Cienciano (Cusco) y el último domingo en Arequipa. Y le falta subir a Huancayo y volver al Cusco.
Resultados | Condición |
---|---|
0-1 Universitario | Local |
1-2 Cristal | Local |
0-1 Melgar | Visita |
* Local en el Nacional |
Malos pasos
Y sufre más el hincha porque ve a un jugador como Jeriel de Santis vestir la blanquiazul y no luchar por esos colores. Más allá de discutir la cualidades como futbolistas, que entendemos aún no las muestra en Alianza, genera la bronca de los íntimos los errores técnicos que presenta (erró el 50% de sus pases). Será la presión, será la ansiedad, pero el atacante hoy no es un aporte para nada.
Parecía ser un partido distinto para los íntimos, porque en los primeros minutos presentaron un rostro novedoso: a la presión de que por sí aplican, empezaron a jugar muy adelantados de la mano de Christian Neira, queriendo ser dominadores del encuentro. Pero apenas les duró unos minutos en los que generaron hasta dos ocasiones de gol que salvó el portero rojinegro Carlos Cáceda.
Y vimos al Alianza de las pelotas paradas trabajadas. No las lanzaban al área a pesar de la talla de De Santis o Zambrano, trabajan el balón preparado aunque no todas terminaron como querían.
Luego vimos el Alianza de siempre: defendiendo bien y buscando, esta vez, a Franco Zanelatto para generar alguna contra. Pero la poca productividad de Jeriel De Santis apagaba cualquier intención.
El gol fue premio para el que mejor hizo las cosas con el balón, porque Cristian Bodacahar sabe jugar a los espacios y Tommy Martínez levantó para la segunda parte con el juego triangulado. Melgar hizo que el partido se juegue a su ritmo y encontró oro con el tiro libre de Cabrera, tras unas fuerte falta de Zambrano que tuvo que salir del área a cortar una jugada.
Padece Alianza en ataque, sea por la mala suerte, la mala planificación o la mala contratación. Contaba con Pablo Sabbag, pero este se lesionó jugando por su selección Siria en la Copa África -las malas que existen en el fútbol-. Trajo a Cecilio Waterman, pero el panameño más que un goleador nato es un luchador eterno. Pelea todas y en ese afán, terminó lesionan en el partido pasado ante Grau. Tiene a Hernán Barcos, quien no se lesiona pero a quien se le notan los 40 años recién cumplidos. No porque le falte físico, sino que su juego no ese que vaya al ritmo de velocistas como Kevin Serna, D’Arrigo -en deuda-, o el mismo Zanelatto.
Y claro, llegó Jeriel de Santis para cubrir la baja de Sabbag. Con 22 años se pensaba en un refresco en ataque, pero el jugador nacido en Estados Unidos de padre italiano y madre peruana, está lejos de ser un jugador que Alianza necesita. En los última temporada 2023-24 no marcó tantos y en la 2022-23 llegó a once, su mejor y quizás único buen año, ya que antes apenas había hecho dos tantos desde su debut en el 2019.
--
Ver noticia en El Comercio: DT