LEE: Cuatro goles por primera vez en el año y una columna fortalecida con Garcés, Rodríguez y Serna: Por qué la goleada ante Mannucci ilusiona a Alianza de cara a la Copa | ANÁLISIS
La ‘U’ visitará a Junior en Barranquilla, Colombia, en busca de hacer historia. Los merengues han ganado al menos una vez en ocho de los nueve países sudamericanos que visitó por la Copa, solo le falta la nación cafetera. Por su parte, los íntimos quieren revivir, este miércoles ante Cerro Porteño, la hazaña conseguida el año pasado en Paraguay: vencieron 2-1 a Libertad con goles de Pablo Sabbag y Aldair Rodríguez.
Los caminos están separados. Uno en Colombia, el otro en Paraguay. Pero el objetivo es el mismo: conseguir un buen resultado -léase triunfo o empate- de visita por la Copa, algo sumamente difícil para los equipos peruanos. En los últimos 39 duelos fuera del país, los clubes nacionales solo han conseguido dos victorias (Cristal 2-1 sobre The Strongest en La Paz, y Alianza 2-1 ante Libertad en Asunción; ambos el año pasado); después acumulan 33 derrotas y cuatro empates.
“No pensamos en ir a Barranquilla por un empate”, declaró Edison Flores, atacante merengue. “Es importante ir a Paraguay y plasmar nuestra idea, competir como el equipo se está acostumbrando”, señaló Alejandro Restrepo, técnico aliancista. La ilusión está intacta, ¿pero hay motivos para ilusionarse? La respuesta -por más optimista que sea- es sí. Y se argumenta desde el banco de suplente: los técnicos, tanto Fabián Bustos como Restrepo, han demostrado estar a la altura de la Copa en el debut, ahora buscarán más.
“Son entrenadores que entienden algo que me parece básico cuando eres técnico de un club peruano: si quieren competir en la Libertadores y que no te pasen por encima, tienen que priorizar desde un equipo ordenado en defensa. Primero te paras bien atrás y, a partir de eso, cuando los cimientos son sólidos, piensas en construir”, analiza Adrián Cabrejos, de la recordada página “Embajadores Criollos”, especializada en darle seguimiento a los peruanos en el exterior hasta hace poco.
En el duelo de pizarras, tan importante en el fútbol de hoy, los compadres tienen dónde apoyarse para soñar con pelear en la Copa. Ambos con el 3-5-2 o 5-3-2 como idea principal, buscarán retornar al Perú con la satisfacción de un buen resultado después de un arduo trabajo.
Bustos: sin ‘9′ de área y con un mediocampo ‘mordedor’
Si hay una palabra que defina a Fabián Bustos como técnico es: pragmático. Al igual que su hermano Carlos -campeón con Alianza Lima en 2021-, el argentino suele señalar que “se acomoda” a lo que encuentra en un equipo. Ese aspecto es el que gustó en la dirigencia de Universitario a la hora de contratarlo. El argentino llegó y no tóco el 3-5-2 que dejó Fossati, el DT campeón 2023. Respetó el proceso y solo se encargó de afinar algunas cosas para plasmar su idea con la que salió campeón de Ecuador dos veces y llegó hasta semifinales de la Libertadores con Barcelona de Guayaquil.
De la base de la ‘U’ campeón sigue la línea de tres centrales (Corzo, Riveros y Di Benedetto), Andy Polo, Ureña, Pérez Guedes y Flores. Solo entraron el portero Britos, Portocarrero, Christofer Gonzales (hoy lesionado) y José Rivera. El ‘Tunche’ tiene tan buen presente tras anotarle un doblete a LDU en el debut en la Copa que es casi imposible -por ahora- que salga del once titular.
La novedad ante los ecuatorianos fue que Bustos decidió jugar sin un ‘9′ de área. Dejó en el banco a Diego Dorregaray y utilizó a Rivera como acompañante de Edison Flores. Los dos han jugado como extremo o segundo delantero y le dieron mayor movilidad al ataque crema, haciendo que los centrales no tengan una referencia para marcar. Las diagonales del ‘Tunche’ y el retroceso del ‘Orejas’ fueron fundamentales para generar los ataques.
Este martes, en Barranquilla, Bustos solo hará un cambio. Jorge Murrugarra ingresará en lugar del lesionado Gonzales. ‘Murru’, un mediocampista defensivo, actuaría como interior por izquierda, mientras que Pérez Guedes lo hará por derecha. El técnico busca un medio luchador, físico, con mucho corte defensivo para contrarrestar los ataques de los colombianos. Arriba, la dupla Flores-Rivera seguirá aunque en el banco estarán dos nueves como Valera y Dorregaray, mientras que en la defensa todo sigue igual con Britos en el arco; Corzo, Riveros y Saravia en la línea de tres. Polo y Portocarrero, dos carrileros con mucho ida y vuelta, completarían el once inicial.
Restrepo encontró el equipo base
“Restrepo llegó con el antecedente de un Deportivo Pereira que priorizaba el orden antes que cualquier otra cosa”, explica Cabrejos. Al colombiano, considerado una promesa de la nueva camada de técnicos colombianos aplicados, le costó en un principio encontrar a su once base, pero parece haberlo encontrado. Con un Zambrano como líder absoluto de la zaga de tres, Rodríguez como primer pase en la volante y Serna como una pieza desequilibrante en ataque como segundo delantero (empezó como carrilero por derecha); Alianza acumula tres partidos consecutivos sin caer con dos victorias (3-0 a Chankas y 4-0 a Mannucci, y un empate sin goles ante Fluminense).
Restrepo no solo le está agarrando la mano al equipo, sino que ha encontrado una nueva vía para llegar al gol: jugadas de balón parado. “Tenemos mucho trabajo con mi asistente, con nuestro analista, que es la pelota parada, donde intentamos tener variedad, entrenar muchas situaciones y podemos abrir un partido que por lo que hizo Mannucci, estaba siendo muy difícil abrirlo”, señaló el entrenador tras el último triunfo ante el cuadro trujillano en el que el primer y segundo gol llegaron por ese camino.
Rodríguez es un ‘10′ que actúa como primer pase para Alianza y es también el encargado de todos los tiros libres o corners. Su buen pie ayuda a que el técnico pueda trabajar los centros con jugadores altos como Ramos (1.89 mts.), Freytes (1.87), Zambrano (1.85), Garcés (1.82) y Waterman (1.80). Hoy, Alianza tiene la capacidad de hacer daño con juego, con la subida de los carrileros o el desequilibrio de Serna, y con las estrategias de balón parado.