Chivas mostró dos caras en el duelo ante La Máquina. El primer tiempo lo jugó bien, marcó un gol y se veía sólido, en el complemento se colapsó el Rebaño y entregaron el partido. En el segundo acto en Zapopan los de Caixinha fueron unas máquinas y arrollaron a los tapatíos con un marcador de estruendo.
Chivas 1, Cruz Azul 3.
El primer lapso fue más peleado que bien jugando. Los dos equipos mostraron sus Armas, pero no lograban abrir a las defensas rivales. Cruz Azul presentó en sociedad a Walter Montoya y presentaba una propuesta ofensiva con cuatro atacantes nominales, pero aún les falta coordinación.
La primera de peligro fue para los rojiblancos, a los seis minutos Alan se desmarcó, la mató con el pecho, pero Rocco evitó que el balón fuera al arco.
Antes del minuto 15 la banca del Rebaño pedía un penalti por un empujón sobre ‘La Chofis’, pero el árbitro no la concedió.
Hasta el minuto 20Rodolfo Pizarro era el mejor hombre sobre la cancha, pero no llegaba la jugada que pudiera abrir el cerrojo defensivo, mucha intensidad de Pizarro, pero faltaba algo para hacerle daño al portero Corona.
Al 22 ‘Chofis’ comandó una contra, avanzó con velocidad y sacó zurdazo a la base del poste y Corona voló para mandar a tiro de esquina.
Después de esta jugada el partido cayó en un bache y se volvió pesado, lento, sin ideas y los dos equipos no podían darle profundidad al juego. No fue hasta el minuto 34 cuando la Chofis robó el balón, se la dio con ventaja a Pizarro, quien mandó un centro muy pasado para Alan Pulido, pero a segundo poste llegaba Carlos Cisneros, para volar y de palomita abría el marcador. Cuando el partido se volvía espeso y sin claridad, llegó el talento y el gol rojiblanco.
Al 43 Felipe Mora fallaba una muy clara para la Máquina, la mandó cerca del poste izquierdo de Cota y se salvó el Rebaño. Con la ventaja por el gol de Cisneros acabó el primer tiempo, Chivas era mejor que los Cementeros.
El complemento empezó con polémica. En un centro al corazón del área Jaír Pereira jala del brazo a Carlos Fierro, quien cae al pasto y el silbante decretó pena máxima. Sí hay contacto de Jaír con el jugador cementero, pero no parecía penalti. Desde el manchón llegó Felipe Mora para empatar los cartones.
Tras el gol de los visitantes, el partido vino a menos, y desde la banca buscaron los técnicos alguna solución, los Celestes mandaron al Gullit y a Víctor Zúñiga, buscando tener el balón y poder conectar con los ejes de ataque, pero no funcionaban los movimientos. Por su parte, Al Elda mandó al rectángulo verde a Brizuela y a Macías, buscando atacar con dos nueves de área buscando el gol de la diferencia.
El partido se inclinó para los Celestes conjugando un acierto y un error. Rafael Baca vio una avenida más grande que la de Los Insurgentes y la aprovechó, avanzó cinco metros, otros cinco, cuando menos acordó llevaba 20 metros enfilando al arco de Cota, se preparó y disparó con potencia y colocación. Golazo de la Máquina y nadie nunca le salió. Le regalaron 20 metros y el cementero no los desaprovechó. Ni Salcido, ni Pizarro detuvieron a Baca, el capitán Salcido se vio lento ante la velocidad del volante visitante.
Al final, Chivas se olvidó de la marca y aceptó el tercero de los visitantes. Mora anotó sin portero el tercero de la noche y Chivas no tuvo fondo físico al final del compromiso.
MC