La garra y la elegancia entraban a la cancha cada vez que Gheorghe Hagi hacía su aparición. El ‘Maradona de los Cárpatos’ nos regala a aquellos que lo vimos muy jóvenes y a aquellos que no pudieron disfrutar de su talento, una muestra de su clase. Sigue siendo un crack. Ahora con 51 años.
La sensación al ver su golazo en primera, desde uno de los extremos, lleva a la nostalgia de otros tiempos. De sus grandes actuaciones con la camiseta del Barcelona y, mejor aún, con las que llevó a cabo con la selección de Rumanía, en aquel inolvidable Mundial de Estados Unidos 94.
La clase que superó a Sudamérica
Aquel Mundial empezaba. Uno de los partidos que generó la mayor expectativa fue el Colombia contra Rumanía. Especialmente porque el equipo de Maturana era la sensación de aquellos años. Los cafeteros habían goleado a Argentina por 5 a 0 en las Eliminatorias y se presentaba como el candidato al título de campeón del mundo.
Pero Hagi no lo quiso así. Y el mundo pasó de admirar a Colombia a empezar a elogiar al rumano. Un soberbio gol de larga distancia sorprendía a Óscar Córdoba y colaboraba con el triunfo final de su selección por 3 a 1. Su maestría ya llegaba a los ojos del mundo.
Ya en octavos de final, eliminó a otro favorito, la selección de Argentina. Partido en donde también anotó. Con los años, y llevando a su selección también al Mundial de Francia 98, el crack rumano se convirtió en leyenda. A pesar de estar retirado del fútbol profesional hace mucho tiempo, continúa siendo admirado en varias partes del planeta. Ojalá siga regalando golazos como este para seguir recordando su clase.
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