Marco Reus está de vuelta. Fuera de los terrenos de juego desde el pasado 27 de mayo después de caer lesionado en la final de Copa de Alemania ante el Eintracht Frankfurt, el atacante de 28 años ha vivido una nueva y complicada travesía por el desierto. Así, el de Dortmund ha tenido que esperar ocho meses hasta volver a ponerse las botas y oler el césped.
Fue el pasado 10 de febrero y el 29 veces internacional (9 goles) estuvo 70 minutos en el choque ante el Hamburgo en Bundesliga. Apenas cinco días después volvió a ser de la partida en el encuentro de Europa League (victoria 3-2 frente al Atalanta), algo que volvió a suceder el pasado domingo en Bundesliga. Su rival en esta ocasión fue el Borussia Mönchengladbach, el que fuera su equipo durante tres temporadas.
Y en su tercer partido Marco Reus volvió a ver puerta. El alemán dio la victoria a los suyos (0-1) con un tanto en el minuto 32. No cabe duda que el regreso de su estrella es una gran noticia para un Borussia Dortmund que aspira a luchar por la Europa League y terminar la temporada como subcampeón de Bundesliga.
Ausente en nada menos que 98 partidos desde que regresó a Dortmund en 2012, nadie duda de la calidad que atesora en sus botas el futbolista de 28 años. De esto son conscientes varios conjuntos de primer nivel que no han dudado en interesarse por su fichaje, como ha sido el último caso del AC Milan. Con el Mundial de Alemania en el horizonte, no cabe duda que una buena recta final de temporada dispararía las opciones del jugador de defender la elástica de la Mannschaft en tierras rusas.