Para el fútbol no hay edad, siempre que haya algo que patear (digamos, un balón, una chapa, una hoja enrollada). Demostración de ello es Roberto Carlos, quien emuló su famoso tiro libre en un duelo de la selección brasileña ante Francia. En las imágenes que ya recorren las redes sociales se puede apreciar el disparo que hace curvatura que podríamos creer imposible de ver. Sin duda, una marca registrada de uno de los mejores laterales zurdos de la historia.
Ver noticia en El Comercio: DT