El 2024 comenzó cargado de esperanzas para los aficionados del FC Barcelona, aunque pronto se vieron enfrentados a múltiples decepciones. El equipo no solo perdió la Supercopa de España y fue eliminado tempranamente de la Copa del Rey, sino que también cayó en los cuartos de final de la Champions League en abril. Las adversidades se agravaron tras perder el Clásico contra el Real Madrid, un resultado que dejó al conjunto catalán al margen de la lucha por el título de LaLiga. Esta serie de eventos desfavorables se vio confirmada con una derrota 4-2 frente al Girona el sábado 4 de mayo, la cual finalmente cimentó la victoria liguera de los de Ancelotti. Tras este escenario, la directiva del club catalán ha advertido que finalizar en tercer lugar podría desencadenar “nuevos escenarios” para el equipo, incluyendo algunos potencialmente “traumáticos”.
Los principales líderes del club, incluidos Joan Laporta y Deco, mostraron rostros angustiados al salir de Montilivi después de la derrota ante el Girona, indicando claramente la gravedad de la situación. El resultado de 4-2 no solo significaba perder el dominio del fútbol catalán, ya que hacía más de ochenta años que ningún cuadro de la región superaba a los blaugranas en la tabla de posiciones.