La derrota del FC Barcelona en el Clásico ante el Real Madrid (2-1) no solo dejó una sensación de desilusión en la afición culé, sino que también dio lugar a un revuelo mediático a raíz de las declaraciones de Ilkay Gündogan, quien decidió no morderse la lengua y expresar sus inquietudes acerca del equipo. Las palabras del experimentado centrocampista alemán acapararon titulares y conversaciones en los medios deportivos durante todo el domingo, y su llamado a una mayor mentalidad ganadora y carácter entre sus compañeros no pasó desapercibido.
Esta no fue la primera vez que Gündogan se mostró decepcionado con el Barcelona, al menos en términos deportivos. Sin embargo, lo que ocurrió el sábado tuvo sus raíces en una situación que va más allá del campo. Según el diario Sport, pocos días después de su llegada, el mediocampista y su familia se sintieron desatendidos, lo que llevó al futbolista a expresar su descontento.