A nueve minutos del final, una incursión de Jair Torrico originó el gol del triunfo de Aurora sobre The Strongest, Darío Torrico que acompañó en la jugada, apuntó bien y derrotó el arco atigrado desguarnecido.
Aurora venció por la mínima diferencia a The Strongest (0-1), en el cierre de la octava fecha y por la serie A del torneo Apertura.
Fue el premio al equipo que buscó más el triunfo, aunque en el segundo tiempo, The Strongest cambió su modo de juego y estuvo cerca de llevarse el triunfo.
Fue un bonito partido, de ida y vuelta. Un primer tiempo bastante movido, con ambos en busca el arco contrario. Osvaldo Blanco tuvo alguna chance para Aurora, Rodrigo Amaral también, hasta hubo un foul claro a Chura que el juez no pitó penal, y una salvaje falta de Luis Barboza a Chura que el árbitro solo sacó la tarjeta amarilla.
En todo caso, el primer tiempo fue favorable a Aurora, pero no afinó la puntería y el partido terminó en esa etapa con el marcador 0-0.
En el segundo tiempo cambiaron las acciones, con mayor predominio de los atigrados que buscaron el tanto de la apertura, aunque hubo dos remates que pegaron en el palo del arco atigrado. Rodrigo Amaral se juntó más con Martín Prost y Jeyson Chura. El Tigre mejoró mucho más con el ingreso de Fernando Saucedo, Luciano Ursino y Cristian Esparza. Ursino tuvo una chance que no concretó con su remate ligeramente desviado, mientras el golero Agustín Cousillas solo miraba el balón. Amaral también tuvo la chance de anotar, tras anular a un zaguero y al golero, con un toque sutil que ingresaba al arco pero Zenteno desvió.
Y, a los 81 minutos, Darío Torrico aprovechó una buena jugada de Jair, el otro Torrico, para anotar con remate certero.
Los últimos minutos fueron de dominio atigrado, aunque de contragolpe también pudo anotar Aurora mediante Leonardo Vaca.
La figura
Jair Torrico: fue vital en el triunfo aurorista, estuvo por todo lado, apuntillando a su equipo. Por izquierda, por derecha, también en la marca, luchando por sacar adelante al «equipo del pueblo». Sobre el final tuvo su premio, una incursión por la izquierda, encontró el resquicio para que Darío Torrico empalme de primera al arco atigrado.