La rivalidad entre Charlotte y Sasha Banks vivió su último capítulo, siendo la hija de Ric Flair quien se quedó con la victoria y se convirtió en una campeona de “hierro”.
Por primera vez en la historia del elenco principal de WWE (en NXT ya había sucedido), se vivió un encuentro en formato “Iron Man”, donde las gladiadoras combatieron por 30 minutos y quien tuviera más rendiciones o cuentas a su favor sería la ganadora.
Por cerca de 20 minutos, las dos gladiadoras se mantuvieron en un encuentro muy cerrado, donde Sasha Banks fue la más dominante, sin embargo, la poderosa Charlotte nunca se rindió e impidió que la campeona se llevara el primer punto.
Finalmente cuando faltaban 10 minutos, Charlotte sorprendió a su rival con un rompecaras desde las alturas, para llevarse el primer conteo de espaldas y el primer punto. El empate llegó cuando Sasha sorprendió con una variante de paquetito a Charlotte con lo que el conteo de tres segundos puso el 1-1.
Sasha le dio la vuelta al encuentro con una Bank Statement. Charlotte atacó con todo la pierna su rival y finalmente la atrapó con una Figura 4. Sasha resistió pero justo cuando el tiempo estuvo a punto de transcurrir, la campeona se rindió.
El duelo tuvo que seguir, por lo que se anunció que tenía que haber una ganadora y ésta sería quien realizara la última rendición.
La lucha siguió su transcurso y el duelo fue complicado, al grado que Sasha Banks sufrió una hemorragia en la nariz. Tras varios minutos, Charlotte aprisionó a su rival con una Figura 4 y luego una Figura 8 para finiquitar el combate y hacerse de su cuarto título.