Cuando se conoció la noticia de que WWE había llegado a un acuerdo para traer de Japón a buena parte de la conocida facción Bullet Club, muchos temblaron de miedo sólo al pensar que podría producirse una cambio de identidad en los personajes de AJ Styles, Karl Anderson, Luke Gallows y, quizás, Finn Bálor. Estando Vincent Kennedy McMahon en la toma de decisiones, cualquier cosa es posible… Sólo hay que ver la expectación que causó la presentación de Lord Tensai, que resultó ser sólo Prince Albert con otro personaje.
Aunque muchos esperaban que llegarían con el nombre de Bullet Club, y más adelante se pensó que podrían llamarse Bulletproof Bálor Club, es muy posible que una de las razones por las que la banda aún no tiene nombre es porque no se llamarán así y el equipo creativo no ha encontrado uno con gancho.
Conociendo como conocemos a los oficiales de WWE, seguro que se han planteado un alto rango de posibilidades para intentar presentar de la mejor manera a estos cuatro fenómenos de la lucha libre profesional. Nadie mejor que la compañía sabe lo que nos gusta y, por eso, debemos preguntarnos: ¿Qué ideas tendrán en mente para relanzar al Bullet Club en WWE y no fracasar en el intento?
Aquí tenemos cuatro propuestas:
4- THE NEW NEW WORLD ORDER
A veces, cuando nos quedamos sin ideas, lo mejor es relanzar algo tuvo éxito. Hollywood es muy fan de esta premisa y, puesto que hay algunos guionistas de cine entre el equipo creativo de WWE, ¿por qué no esperar un remake de la famosa facción nWo? Puede que los días de gloria de los miembros originales hayan llegado a su fin, ¡pero no temáis!, WWE creará un nuevo acto de nostalgia (después de traer de vuelta a Ric Flair y a los Dudley Boys) y aprovechará el carisma de AJ Styles, Karl Anderson, Luke Gallows y Finn Bálor como solo ellos saben… ¡Con un relanzamiento sin los Young Bucks! ¿Por qué? Por robarles el gesto de “Too Sweet”. No puedes esperar meterte con Vince McMahon y ganar, chico.
Por supuesto, la recreación debería ser fiable. El bueno de AJ debería ganar más musculatura, teñirse de rubio platino y dejarse de tantos vuelos para ponerse en la piel de “Hollywood Phenomenal” Hulk J. Styles; Karl Anderson adquiriría un poco de “Latino Heat” para reproducir un fingido acento cubano y convertirse en “The Razorgun” Ramón Anderson, un narcotraficante mujeriego y arrogante; Luke Gallows haría lo mismo que hasta ahora, sólo que tendría que injertarse una larga y cuidada melena para ser “Big Sexy” Nash Gallows; por último, Finn Bálor debería abandonar su personaje de no personaje en NXT y adoptar el rol de Syxx-Pack Finn (en honor a sus trabajados abdominales) para luchar sólo contra los pesos crucero. Muy del estilo de WWE.
3- THE NO-ROMANS CLUB
Aprovechando los ataques de Anderson y Gallows sobre su predilecto Campeón de Peso Completo y el inminente combate entre Reigns y AJ Styles en WWE Payback, ¿por qué no iban a fundar el “Club de los No Romans”? Con un rechazo al más puro estilo de Homero Simpson, el odio que sienten muchos hacia Reigns llegaría a un nuevo nivel cuando las camisetas de esta nueva facción se agotasen a los cinco minutos de abrir las puertas de cada estadio o pabellón. Imaginad a todos los asistentes con su camiseta anti Roman Reigns, artículo que lo compararía aún más con John Cena y su camiseta hater.
El adictivo afán de hacer dinero con todo lo que sea llevaría a la compañía a escuchar la voz de miles de aficionados que odian… No, odiar es una palabra muy fea, digamos que no toleran la presencia de Roman Reigns como cara de la compañía. AJ, Karl, Luke y Finn se convertirían, de esta manera, en los salvadores del Universo de la WWE y arrebatarían el Campeonato Mundial de Peso Completo de las manos del hermano perdido de Conan “El Bárbaro” para iniciar una de las épocas ilustradas en la lucha profesional. ¿Quién no pagaría por verlo ya mismo?
2- THE TERIYAKI CHICKENS
Anteriormente mencionábamos el precedente de Lord Tensai, personaje que fracasó estrepitosamente a principios de esta década. Prince Albert tuvo una gran carrera en tierras niponas como Giant Bernard, pero el equipo creativo de WWE no quiso conservar el carácter de su personaje. En su lugar, le otorgó el del pintoresco Tensai, un maestro de la guerra capaz de castigar oponentes y de bailar con Brodus Clay y las Funkadactyls. ¿Por qué iba a ser distinto con AJ Styles, Anderson, Gallows y Bálor si ellos también tuvieron éxito en Oriente? Si por algo se caracteriza Vince McMahon es por mostrar su superioridad cuando quiere: “Me da igual que hayan sido campeones en Japón, aquí irán vestidos con batines de samurai y se llamarán los Pollos Teriyaki”.
Haciendo sus entradas con un estilo entre el “Banzai!” de Yokozuna y la energía del Spirit Squad, The Teriyaki Chickens podrían tener entretenidas rivalidades contra los Social Outcasts en WWE Main Event y desternillantes segmentos en los que recibirían palizas de las caras de la empresa antes de estar preparados para dar el salto a los niveles importantes. Por supuesto, todos tendrían que fingir un estereotípico acento japonés a pesar de ser anglohablantes de nacimiento y ser fanáticos del pollo Teriyaki para hacer las delicias del mandamás… Si no, no sería Vintage Vince.
1- KAMIKAZE-BULLET RENEGADE ORGANIZATION NOT EMBRACING SAMOANS
Llama especialmente la atención que los ataques realizados por Karl Anderson y Luke Gallows en las semanas previas a Payback hayan sido recibidos por tres samoanos. Imaginad que, tras el evento estelar de este domingo, AJ se une a sus viejos amigos y aparece Finn Bálor para fundar juntos el grupo Kamikaze-Bullet Renegade Organization Not Embracing Samoans (Organización de Renegados Balas Suicidas que no Aceptan a los Samoanos) ante los espectadores de todo el mundo. A partir de entonces, los cuatro hombres iniciarían una cruzada contra todos los samoanos de WWE (que no son pocos).
Con una presentación como esa, podría haber consecuencias muy dispares para la facción: O bien tiene éxito y la tensión desemboca en un combate entre AJ Styles y The Rock —como el máximo representante de los samoanos—en WrestleMania 33 para acabar una de las mejores rivalidades de la historia de la empresa; o bien que el grupo dure menos de un mes por las presiones de los grupos de activistas pro-samoanos de Estados Unidos y Vince los mande a NXT en menos que canta un gallo. Valdría la pena sólo por ver promos anti-samoanas de los K.B.R.O.N.E.S. junto a Donald Trump en alguna edición de Raw, posibilidad que beneficiaría tanto al candidado a Presidente como a la imagen corporativa de WWE.
¿Con cuál opción se quedan, conocedores?