Una de las máximas figuras que tiene New Japan Pro Wrestling (la segunda empresa más importante produciendo lucha libre en el mundo) es el llamado King of Strong Style, Shinsuke Nakamura, esta negociando con la empresa su nuevo contrato pues el actual sólo tiene vigencia hasta enero del 2016. Al parecer las negociaciones están en un punto muy álgido pues ambas partes saben del creciente interés que WWE tiene por llevar a Nakamura a Estados Unidos.
Nakamura es considerado uno de los mejores luchadores del mundo y es objeto de culto entre los aficionados del circuito independiente estadounidense, baste recordar la tremenda acogida que le dieron durante los últimos iPPV’s que ROH y NJPW hicieron en conjunto, War of the Worlds 2015:
En la reciente entrega del Wrestling Observer Newsletter, Dave Meltzer menciona el hecho y cita el interés puro del gladiador por incursionar en el mercado occidental después de las esporádicas intervenciones que ha tenido con Ring of Honor. Meltzer también comenta sobre las diferencias que pudieran existir entre el perfil de Nakamura y lo que WWE busca en la actualidad: Nakamura es un gladiador veterano (36 años), las contrataciones de luchadores de esa edad si se han dado, pero sólo para NXT (James Storm, Rhino y Samoa Joe), sin embargo Nakamura es material de roster principal, tiene las capacidades, la altura y sobre todo el carisma necesarios para estar encabezando carteles y vender mercancía como los mejores. Aunque Meltzer no lo menciona, quizá WWE vea en Nakamura a un nuevo Great Muta en potencia.
Lo que sí menciona Meltzer es que hay una diferencia enorme entre este caso y el de Alberto del Rio, pues el dueño de NJPW, Takaaki Kidani, ha mencionado que a sus principales estrellas (como Nakamura, Hiroshi Tanahashi y Kazuchika Okada), WWE tendría que ofrecerles contratos superiores al millón de dólares. Es decir que New Japan puede costear sus contratos, mientras que AAA no pudo en el caso del potosino