En noviembre de 2001, el legendario “Nature Boy” Ric Flair llegó a WWE tras casi ocho años en la competencia. Pero su vuelta no fue como cualquier otra, pues en su llegada se proclamaría propietario de un porcentaje de la empresa, y tras una disputa con Vince McMahon en la edición de Royal Rumble del año siguiente, nació la figura de Gerente General en la compañía. Desde entonces pasaron incontables “GMs” tanto en una marca como en la otra, y momentáneamente, la lista tiene un punto en Kurt Angle (Raw) y Daniel Bryan (SmackDown).
El tema es que el trabajo de ambos gerentes podría estar peligrando. Por un lado, Angle se encuentra en una rivalidad con la Autoridad que lo verá batallar junto a Ronda Rousey en WrestleMania, en una de esas historias que no tienden a terminar bien para el chico bueno de turno. Y por el otro, tenemos a un Bryan listo para hacer su regreso al cuadrilátero, lo que le quita sentido a su continuidad como figura de autoridad del show azul. No es secreto que sus días al cargo podrían estar contados, y aunque el “medallista olímpico” podría permanecer un tanto más con los de rojo, los rumores de una marcha ya se hacen oír en el caso del líder del movimiento del Yes.
Se habló de que Hulk Hogan, a modo de enterrar el hacha con WWE, tomara el relevo del de la barba próximamente. Sin embargo, la misma empresa negó la veracidad de los rumores sobre cualquier posible retorno del Hulkster a su programación, y el mundo de la lucha libre ya ha empezado a especular sobre quién podría suceder a Bryan en el privilegiado puesto. Desde SÚPER LUCHAS nos sumamos a este juego de posibilidades y sugerimos nuestros candidatos a ocupar el rol de próximo Gerente General de SmackDown.
5- Kurt Angle
Reitero, cuando uno combate a la autoridad existe la chance de que las cosas se desmoronen fácilmente. Un triunfo de los medallistas sobre los ejecutivos podrían no hacer más que empeorar la situación para Angle. Podrían haber dos caminos: (1) la fácil, que sería el despido injustificado o (2), la más interesante en mi opinión, el maltrato hacia el múltiple veces Campeón Mundial, que desembocaría en su renuncia.
Y para pagar con la misma moneda, Angle bien podría aparecer poco después, sorpresivamente, presentándose en la “competencia” como el nuevo GM de los de azul. Este escenario podría conducir a un enfrentamiento con Triple H a posteriori, quizá en SummerSlam, además de que ayudaría a “la máquina de lucha libre” a cambiar de aires tras un año como mandamás en Monday Night Raw.
4- Jeff Jarrett
Eso de “Double J” comandando un show no es nada nuevo, pero ya dentro de la grande del entretenimiento, su legado sería mucho más grande del que ya es. Muchos tienden a cuestionar el que el fundador de TNA/Impact Wrestling/GFW ingrese al Salón de la Fama WWE este año, pero está claro que no recuerdan que éste es cuatro veces Campeón Mundial WCW y seis veces Campeón Intercontienental (comparte el segundo puesto de más reinados con este título).
El fan casual probablemente no lo reconozca, pero el conocedor lo conoce bien y a algunos incluso les parezca un escenario de ensueño el que algo así pueda llegar a ocurrir. Además, no vendría mal salirse de la rutina y traer sangre nueva; salirse de los mismos nombres de siempre. No será la primera opción para muchos, y me incluyo, pero no dejaría de ser una posibilidad interesante en la que se podrían hacer muchas cosas considerando su historial como promotor (como meter a Global Force Wrestling en la ecuación, por dar un ejemplo).
3- Shane McMahon
Uno de los rumores que circularon en los últimos meses situaban al más grande de los herederos al trono McMahon haciendo un cambio a rudo a corto plazo. He aquí una manera en que se podría llegar a tal instancia. Visualicemos el que Shane hubiese renunciado a su rol como Comisionado como una forma de alentar a su compañero en WrestleMania 34, Daniel Bryan, a seguir los mismos pasos que él.
Pero después del gran evento, con el barbudo ya fuera del panorama, O’Mac no sólo daría marcha atrás con su decisión y regresaría a su antiguo puesto, sino que quedaría como única figura de autoridad del show (lo que a su vez le daría sentido a las pasadas disputas con Bryan), siempre con el afán de conquistar las llaves del imperio familiar. Esto enojaría a su amigo y por qué no, si se quiere, también encaminaría a un enfrentamiento contra un HHH técnico en un futuro cercano.
Para gustos los colores, por supuesto, pero lo cierto es que el apellido McMahon siempre está relacionado con la palabra “poder”, y si Shane se pasara al bando de los rudos, creo que ese sería el sendero que debería tomarse.
2- Paul Heyman
La casi inminente marcha de Brock Lesnar a UFC deja a Paul Heyman sin un rol en concreto. Ya se venía hablando de la posibilidad de que continúe ejerciendo como mánager de Superestrellas del calibre de Roman Reigns o Ronda Rousey, pero, ¿y si en lugar de seguir acompañando a otras estrellas, las mandara? ¿Qué tal si Heyman usara sus dotes al micrófono para manejar no a un luchador o una luchadora en particular, sino a una marca entera?
En lo personal, encuentro esa posibilidad atractiva y refrescante, y no nos olvidemos del hecho de que el show azul y él tienen una historia detrás (el “abogado” fue una de las cabezas creativas del programa en su momento), lo que podría ser usado de alguna manera para darle sentido a su hipotética asunción.
1- The Miz
Imaginemos el siguiente escenario: Miz pierde su título en WrestleMania y se ausenta durante las siguientes semanas para pasar tiempo con su hija recién nacida. En su regreso, el “asombroso” es movido a SmackDown, pero lo más impresionante es que actúa como técnico, alegando que la llegada de su bebé lo sensibilizó y le hizo ver las cosas con claridad. Quiere dejar atrás su cobarde actuar, pues es una persona nueva. Ya no es más The Miz, ahora es Mike Mizanin.
A todo esto, el Sr. McMahon (o quien fuese) promueve a Mizanin como una historia de redención, un ejemplo de cambio, y como SD Live! es el show de las oportunidades, el ex Campeón Intercontinental obtiene su petición de ser el nuevo Gerente General de la marca. Eventualmente, Miz revelaría que todo era un engaño y se aprovecharía de su poder para ridiculizar a su archienemigo: Daniel Bryan. De esta manera, una lucha entre ambos se vendería sola.
Fuese de este o de cualquier otro modo, una transición de este tipo ayudaría enormemente a un Miz que viene ascendiendo cada vez más y que podría subirlo aún un escalón más arriba entre las estrellas más importantes de la organización.