22/11/2024

A roller coaster: The creative downfall of SmackDown Live.

Sábado 03 de Febrero del 2018

A roller coaster: The creative downfall of SmackDown Live.

The statements that the great commentator Corey Graves recently made to Edge & Christian on their Pod of Awesomeness brought a variety of opinions regarding the best product that WWE currently provides. Perhaps this is not the case for NXT, and it may have a lot to do with the fact that ...

The statements that the great commentator Corey Graves recently made to Edge & Christian on their Pod of Awesomeness brought a variety of opinions regarding the best product that WWE currently provides. Perhaps this is not the case for NXT, and it may have a lot to do with the fact that ...

Las declaraciones que el gran comentarista Corey Graves ofreció recientemente a Edge & Christian en su Pod of Awesomeness trajeron diversidad de opiniones respecto a cuál es el mejor producto que WWE brinda en la actualidad. Quizá no sea el caso de NXT, y puede que mucho de esto tenga relación con el hecho de que la conducción de la misma no esté en manos de Vince McMahon, pero especialmente en los últimos años, la compañía ha atravesado grandes ascensos y decaídas en sus dos shows emblema: Raw y SmackDown.

No podemos negar que desde la división de marcas, allá por julio de 2016, con el rumbo que tomó la empresa, basado en escuchar más a los aficionados y no tanto en decantarse por darles los gustos a unos pocos individuos puertas adentro, la programación se fue encaminando por una senda mucho más interesante y entretenida. Especialmente con el resurgimiento de SmackDown, un producto fresco y diferente que provocó deleite entre propios y extraños por un buen tiempo, devolviéndole aquel prestigio perdido con los años.

Shane McMahon y Kevin Owens protagonizaron una de las únicas rivalidades interesantes de los últimos meses en SmackDown.

El tema es que WWE es una montaña rusa y, como no podía de otra forma, SmackDown pronto perdería dicho encanto. Y si en un principio la crítica recaía en la falta de oportunidades para ciertos talentos, hoy la problemática es mucho más compleja, pues no sólo se extiende hacia el mal manejo para con parte del elenco, sino que también con la ruta creativa que ha tomado el programa comandado por Shane McMahon en los últimos meses.

Y eso de “los últimos meses” es ser bondadoso, porque la cosa viene ya de rato. Me atrevería a decir que todo comenzó con la conquista de Jinder Mahal, una movida que desde lo creativo dio bastante que hablar. De ahí en adelante todo se fue en picada; con un reinado monótono y repetitivo que consistió en promos similares, los Singh Brothers recibiendo palizas y siempre los mismos rivales (Randy Orton, AJ Styles y Shinsuke Nakamura). Y si al comienzo simpatizamos con el índo-canadiense por su condición de “encajador de derrotas” y su humilde e inspiracional historia, su limitada capacidad luchística no hizo nada para ayudar. Hoy no hay duda de que su reinado no rindió.

Jinder Mahal se alza con el Campeonato WWE en Backlash 2017 / WWE

Pero la culpa no debe recaer en él, y es que la tarea de la empresa debió haber sido ocultar esas falencias lo más posible, maximizando sus fuertes. Y lo cierto es que éste tenía un micrófono bastante decente, algo que deberían haber explotado contando buenas historias. Por supuesto, nada más lejos de la realidad.

Pero contar buenas historias parece ser algo que se les ha hecho complicado últimamente. Veamos, por ejemplo, el caso de Riott Squad. Apenas llevan un par de meses en el elenco principal y sin embargo ya han perdido toda credibilidad. Tye Dillinger tiene todo para ser una estrella, pero cuando aparece en televisión es para perder. Los New Day llevan estancados desde su contienda con The Shield. La carrera de Dolph Ziggler va en círculos. Breezango es un chiste que ya no tiene gracia. ¿Y ahora Rusev es el chiste de turno…?

¿Qué decir, por otra parte, de AJ Styles y su trato como máximo monarca? Puedo decir que su combate contra Kevin Owens y Sami Zayn, independientemente de haber sido el primer encuentro de Royal Rumble, fue de por sí una pésima idea. ¿En verdad había chances de que viésemos a dos gladiadores portando el título WWE como si de los Campeonatos Mundiales por Pareja se tratase? Mientras tanto, los canadienses lucen cada semana más débiles.

AJ Styles retiene el Campeonato WWE en desventaja ante Kevin Owens y Sami Zayn en Royal Rumble.

Pero lo peor radica en el bookeo del show en general. Con combates por equipos casi todas las semanas, el show azul ha vuelto a recibir el “manejo fácil” que tanto lo caracterizó en su peor época; aquel que consiste en promos que acaban en ataques, interferencias en los combates, descalificaciones cuando no hay intención de dañar estatus y más luchas por equipos. Una lástima, porque no era un problema que viéramos anteriormente y en consecuencia ha acabado por dejar de causar interés en el aficionado acérrimo, y ni hablar del casual.

John Cena vs. Finn Bálor estelariza Monday Night Raw.

Uno de los grandes hándicaps de la marca ha sido desde el principio la falta estrellas de renombre, punto que se está haciendo cada vez más notorio a raíz del agotamiento de casi todas las rivalidades interesantes que se pudieron combinar con este elenco. Ya se pide a gritos el próximo Superstar Shake Up. No es algo que afecte a Monday Night Raw, que se da el lujo de realizar combates destacados casi todas las semanas.

Estamos en comienzos de febrero, lo que significa que nos encontramos en uno de los momentos más calientes del año. WrestleMania ya está a la vuelta de la esquina y todo hace indicar que grandes contiendas nos aguardan para la gran cita de abril; esperemos que de ahora en más WWE no nos defraude y esté a la altura en esta ruta al escenario más grande de todos.

¿Qué les parece? ¿Están de acuerdo con lo argumentado en el escrito? ¿Difieren o añadirían algún otro punto? ¿Cuál es la mejor marca de WWE en la actualidad? Dejen sus opiniones en la caja de comentarios.

Advertisements

Ver noticia en SuperLuchas.com

Temas Relacionados: