A principios de este mes Tino Fernández se reunió en el Ayuntamiento con Xulio Ferreiro, nuevo alcalde de A Coruña tras la victoria electoral de la Marea Atlántica. La cumbre fue cordial y positiva, con el estadio de Riazor (propiedad municipal) en el centro dela mesa. El consistorio aseguró que mantendría las obras de las cubiertas aprobadas por el anterior gobierno y se ofreció a intermediar en los aspectos sociales.
Pero hubo más, otro de los temas que se trataron fue el posible patrocinio de Riazor. El Deportivo busca desde hace tiempo una empresa interesada en esponsorizar el estadio, como ocurre en otros campos como el del Mallorca o Espanyol. El consejo blanquiazul trabaja en firme en ello como vía para aumentar los ingresos, lo que de paso elevaría el tope salarial.
El presidente del Deportivo encontró de nuevo colaboración en Xulio Ferreiro, obteniendo luz verde para buscar ese patrocinio. La única condición impuesta por el alcalde fue la de mantener el apellido Riazor en el nuevo nombre que llevaría el estadio.
La búsqueda del patrocinador tiene el visto bueno municipal, aunque todavía está muy verde. Algo más avanzada está la posibilidad de que un fondo de inversión pudiese adquirir los 44 millones de la deuda privilegiada con Hacienda. La entidad interesada la compraría y el Depor la pagaría en más años y más cómodamente a cambio de mayores intereses. El club rastrea en el mercado americano y asiático.