El demócrata Richard Blumenthal se despachó a gusto contra la FIFA en la sesión que el Senado de Estados Unidos dedicó a la organización que preside Blatter. "Comparar a la FIFA con la mafia es casi un insulto a la Mafia ya que la corrupción de esta organización nunca ha sido tan descarada, obvia y arrogante como la que hemos conocido ahora en el ente que rige el fútbol mundial", afirmó Blumenthal.
El senador demócrata dijo que se sentía soprendido y abochornado por "lo que ha salido en las últimas semanas" y temeroso "de que pueda ser sólo la punta del iceberg". "Han sido muchos años de contaminación y las investigaciones nos llevarán hasta el punto exacto que alcanzó la corrupción. Podemos llevarnos aún más sorpresas".
El Senado de Estados Unidos criticó que Blatter rehusará la invitación para responder a las preguntas de sus miembros. Tampoco estuvo el presidente de la federación norteamericana, Sunil Gulati, quien envió a dar la cara a su secretario general, Dan Flynn. "El presidente Gulati ha delegado en mi persona porque yo conozco más sobre el tema", dijo Flynn que admitió que "tenía sospechas sobre los manejos en la FIFA, pero no podía decirlo porque no tengo pruebas contundentes de esas irregularidades". "Estados Unidos tiene en la FIFA el mismo peso que cualquiera de las otras 208 federaciones que la integran, y por lo tanto nuestro margen de maniobra es limitado", añadió el secretario de la Federación de EE UU.
Sin embargo, el periodista británico Andrew Jennings, que también intervino en la sesión del Senado norteamericano, precisó que "ya en 2011 entregué a la federación de Estados Unidos pruebas inequívocas de la corrupción en la FIFA, pero no me hicieron mucho caso", se lamentó.
Flynn replicó que la federación norteamericana había tratado de usar su papel e influencia "muy limitado" para convertirse "en un firme puntal de la reforma de la FIFA mediante la mejora de su transparencia y el fortalecimiento de sus normas de ética".