Cristiano llegó al centro deportivo de la Continassa pasadas las 9.20 de la mañana italiana, según se aprecia en unas imágenes difundidas por los medios locales, después de pasar las últimas dos semanas en cuarentena obligatoria en su casa turinesa.
El portugués había regresado a Turín el pasado 4 de mayo procedente de Madeira, donde se había ido en la fase más aguda de la pandemia del coronavirus, y la reglamentación italiana prevé que quienes regresen del extranjero respeten quince días de aislamiento.
CR7, que marcó 25 goles en 32 partidos este año, podrá entrenar en las próximas horas de forma individual en el centro deportivo del Juventus, a la espera de que llegue el visto bueno del Comité técnico científico para las sesiones en grupo.
La última vez que el luso había ido a la Continassa se remontaba al 8 de marzo, día en el que el Juventus doblegó 2-0 al Inter de Milán en el Derbi de Italia y se hizo con el liderato liguero con un punto de ventaja sobre el Lazio, segundo.
Tras someterse a los controles médicos, Cristiano se fue del centro deportivo pasado el medio día italiano.