Lewis Hamilton está enfocado, sabe que no puede controlar lo que pase con su rival, Nico Rosberg y tiene que hacer su trabajo mejor que nunca.
El piloto británico aseguró que no correrá riesgos innecesarios que puedan poner en riesgo la temporada, pues quiere pelear hasta el final.
"Sé que tengo que ganar todas las carreras que restan. Tengo que estar involucrado con que mi auto sea el mejor. Si hay un momento para ser el mejor piloto que pueda ser es este. Haré mi parte", dijo horas antes de rodar por primera vez en el Autódromo Hermanos Rodríguez para este Gran Premio.
El actual campeón del mundo espera que todos los involucrados estén en sintonía para cerrar tan dominantes como lo han sido toda la temporada, "Sé que el equipo está trabajando lo mejor que puede. Es lo mínimo que podemos esperar de ellos. Estoy esperando y deseando que mi carro se mantenga fuerte y sólido para las tres carreras que restan", agregó.
Hamilton evita todas las preguntas referentes a lo que pueda pasar con Rosberg, quien mantiene el discurso de valorar carrera con carrera, a pesar de la ventaja de 26 puntos, "Es una táctica, lo ayuda a estar enfocado. Todos tenemos formas diferentes de manejar la presión y así es como lo hace él", valoró.
La presión de este cierre le ayuda a disfrutar más de este deporte, "No me gustan las carreras fáciles, cuando hago salada para divertirme siempre voy a la pare más difícil, no subo por lo más simple. Estoy listo para pelear y su no resulta bien no importa. Lo que importa es que tengo que hacer mi trabajo, ganar la pone y la carrera. Esa es mi meta", finalizó el piloto de Mercedes, quien tiene 26 puntos de desventaja con el alemán.