Fue cuarto en el Dakar 2016, su primera vez en el Rally más extremo del mundo, y sexto en el del siguiente año, pero luego, aunque en la competencia mejoró, la suerte no estuvo precisamente de su lado. O quizá sí, dependiendo del enfoque que se le dé.
Adrien Van Beveren, motociclista de 29 años, se ha visto obligado a abandonar la carrera tres años consecutivos. Esta vez, lamentablemente, no fue la excepción. El capitán de Yamaha tuvo que retirarse en la tercera etapa por un aparatoso accidente en el tercer kilómetro.
El piloto perdió el control del vehículo y salió volando por los aires, cayendo en la arena varios metros más adelante. Aunque inicialmente quedó inconsciente, rápidamente fue auxiliado y llevado en helicóptero al campamento, donde, ya consciente, fue atendido. Sufrió fractura en la clavícula derecha y golpes en la cara y cadera.
No es la primera vez que no puede terminar la carrera. En 2018, cuando estaba por terminar la décima etapa, líder con una gran ventaja sobre el resto de rivales, chocó con una roca, salió proyectado, se perforó un pulmón y se rompió una clavícula. En 2019, nuevamente quedó fuera por la rotura de su motor. Aún tenía opciones de ganar, a dos días del final.
Por otro lado, su hermana Florence usó las redes sociales del piloto para agradecer los mensajes y comentar que el francés tuvo suerte y regresará mucho más recargado.