Veloz, potente, definidor y criterioso para decidir en los metros finales. Su gran actuación del último domingo en Lokomotiv jugando de '9', no es un déjà vu del Jefferson Farfán en su etapa final en PSV donde tuvo que suplir al grandote de Jan Vennegoor of Hesselink para llevar a los 'Granjeros' a conquistar el tetracampeonato de la liga.
Físicamente anda volando y está con mucha confianza, en conclusión se le ve feliz. En tiempos donde Paolo Guerrero (titular indiscutible en la Selección Peruana) se encuentra en algodones, da mucha tranquilidad que Farfán se haya sumado a Raúl Ruidíaz como alternativa jugando en esa posición. A la defensa del Zenit la tuvo loca. Sus diagonales siguen siendo mortales. Hizo cuatro: dos terminaron en el arco, una con un pase gol y otra cerca del palo. Jefferson vive su segunda juventud jugando, sintiéndose la figura de un equipo que es líder de la Liga Premier de Rusia y que no sale campeón desde el 2004.
Destaco la recuperación del idilio con las redes, pero también la gran capacidad para discernir cuando culminar y cuando habilitar. Su velocidad puede ser clave para de arranque o en algún momento de la serie dejar desparramada a la lenta defensa neozelandesa. Jefferson está de vuelta y lo ha hecho en el momento justo.
