¿En qué falla Paraguay y cómo Perú debe aprovecharse para sacar un triunfo de visita?

• ¿Por qué el partido ante Paraguay no define el futuro de la bicolor en las Eliminatorias?

En la coyuntura actual del equipo dirigido por Guillermo Barros Schelotto, destacan al menos tres puntos claves que podrían contribuir a una victoria para la bicolor, abordando diferentes enfoques: el aspecto deportivo, el psicológico y el social. Estas aristas podrían inclinarse a favor del combinado patrio, aunque cabe destacar que no garantizan necesariamente el éxito en Ciudad del Este.

Nuevos rostros

Casi un tercio de la actual selección de Paraguay está a punto de vivir sus primeras Eliminatorias, lo que resalta el proceso de cambio generacional en el equipo guaraní. Sin embargo, es importante señalar que esto no está respaldado por generaciones exitosas, recordando que Paraguay no ha logrado clasificar a un Mundial desde 2010.

Dentro de los ‘nuevos talentos’, destaca un dato particular en la posición de arquero, ya que Barros Schelotto se verá obligado a confiar en un guardameta debutante en esta fase previa al Mundial. Ni Carlos Coronel, ni Santiago Rojas, ni Juan Espínola han tenido experiencia previa en esta competición.

Lo más llamativo de la convocatoria de Paraguay para las Eliminatorias Sudamericanas es la ausencia del experimentado arquero Anthony Silva, quien venía siendo el titular. La decisión del DT Guillermo Barros Schelotto abrió un espacio para el nuevo guardameta de la ‘Albirroja’, aunque los tres posibles candidatos apenas suman tres encuentros amistosos en su carrera internacional.

Sin embargo, es importante señalar que los tres candidatos a ocupar el puesto de arquero titular en Paraguay no son jugadores con poca experiencia a nivel de clubes. Todos ellos superan los 26 años y cuentan con una considerable trayectoria en el fútbol profesional.

Coronel acumuló más de cinco temporadas de experiencia en el Red Bull Salzburgo de Austria y actualmente forma parte del New York Red Bulls en la MLS. Por su parte, Rojas se unió al Tigre de Argentina este año después de siete temporadas en Nacional de Asunción. Espínola es el arquero titular del Olimpia, habiendo pasado anteriormente por clubes como Godoy Cruz de Argentina y otros equipos de su país.

Mochila pesada

El 50% de las participaciones de Paraguay en una Copa del Mundo fueron entre 1998 y 2010, época marcada por la ‘generación dorada’ del fútbol guaraní. En ese período, clasificaron a tres Mundiales consecutivos, alcanzando su mejor resultado en 2010, cuando llegó a los cuartos de final. Después de esa época dorada, Paraguay tocó fondo ocupando la última casilla en las clasificatorias 2014 y dos intentos fallidos en los dos siguientes procesos. Con estos fracasos sobre la espalda llega la ‘Albirroja’, dirigida por Guillermo Barros Schelotto, a las Eliminatorias Sudamericanas 2026 con la ilusión de volver a un Mundial. ¿Cómo puede afectar esto contra Perú?

En primer lugar, esta situación puede generar una presión adicional sobre los jugadores, quienes son conscientes de que tienen la oportunidad de escribir su propia historia y devolver a Paraguay a la máxima competición internacional. Esta presión serviría como una motivación positiva, impulsándolos a esforzarse al máximo. Sin embargo, también daría lugar a sentimientos de ansiedad y estrés, lo que, a su vez, podría afectar negativamente el rendimiento de los jugadores en el campo contra Perú.

En segundo lugar, los fracasos experimentados en las últimas eliminatorias afectan la confianza del plantel, teniendo en cuenta que 21 futbolistas disputaron el proceso rumbo a Qatar 2022. Los jugadores podrían sentir que no son capaces de lograr la clasificación a un Mundial, y eso tendría un impacto negativo, siendo el camino hacia una mentalidad derrotista.

Adiós al fortín

Paraguay quiso empezar jugando estas Eliminatorias en otro recinto. Eligieron el estadio Antonio Aranda Encina de Ciudad del Este para recibir a Perú. Así, dejaron de lado el histórico Defensores del Chaco, testigo de mil hazañas no solo de la selección nacional, sino también a nivel de clubes internacionalmente. Sin embargo, el Defensores del Chaco hace tiempo que dejó de ser un fortín para el equipo de Barros Schelotto. Esto se debe, en gran parte, a los malos resultados que han obtenido en los últimos años. Los aficionados han dejado de llenar las 42 mil graderías, quitándole el plus de la afición pasional de antaño.

Una de las razones más importantes para optar por el estadio Antonio Aranda Encina fue el dulce recuerdo de su último partido como local en las anteriores clasificatorias, derrotando a Ecuador, una selección que disputó Qatar 2022. Está comprobado que el estadio lucirá un lleno total, lo que sin duda será un factor de motivación para la selección paraguaya. Pero hay que tener en cuenta que es un nuevo público, que no está muy acostumbrado a este tipo de partidos. Este nuevo hincha podría perder la paciencia rápidamente si la selección no cumple con sus expectativas. Además, al ser un estadio más pequeño, la presión hacia la selección sería mayor y terminaría pasando factura al equipo paraguayo.

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