La Revolución de las Divas ha tenido momentos rescatables y momentos criticables. De los primeros, podemos mencionar encuentros tan memorables como Charlotte vs. Natalya, de NXT Takeover, el 29 de mayo de 2014; Becky Lynch vs. Bayley vs. Sasha Banks vs. Charlotte en NXT Takeover: Rival, el 11 de febrero de 2015; Becky Lynch vs. Sasha Banks en NXT Takeover: Unstoppable el 20 de mayo de 2015, y, finalmente, el clímax con Bayley vs. Sasha Banks en NXT Takeover: Brooklyn y en NXT Takeover: Respect. Los últimos 3 encuentros mencionados son recurrentes en las listas de mejores luchas de NXT: Mejores luchas de NXT, de WWE.com, Mejores luchas de 2015, de WWE.com, Mejores luchas de 2015 para los lectores del Wrestling Observer.
Casi todas las mencionadas de arriba están en el elenco principal, donde el nivel de sus combates ha disminuido notablemente. Eso nos lleva a preguntarnos qué pasaría con la más talentosa luchadora que actualmente tiene NXT, Asuka, de llegar al elenco principal, o si, por el contrario, sería mejor que siempre se quedara en la marca amarilla, donde ha podido conectar con la base de fans por las siguientes razones:
5- Carisma
El personaje de Asuka entró haciéndose notar con su llamativa entrada, colorido y particular vestuario, cabello de colores y máscara. Luego empezó a trabajar su expresividad cuando imitó a Dana Brooke, repitiendo sus gestos característicos. Pero son sus caras las que comunican, cuando Dana la abofeteó y luego le dio unos golpecitos en la cabeza, Asuka se quedó quieta: lo cual generó en el público el cántico “As’ka is gonna kill you!”, levantó la cara y luego le sonrió demencialmente. Su rostro era de “¡Te voy a matar!” Así llegamos a sus otras expresiones faciales que pueden ser interpretadas como rasgos de su personalidad que ayudan a darle forma al personaje: locura, competitividad y agresividad.
4- Arsenal
Parte de lo que hace diferente a un luchador es su repertorio de movimientos, porque lo destaca del resto, por eso genera emoción cuando un luchador le “roba” su movimiento a otro, considerado esto una humillación.
Con doce años de carrera, habiendo pasado por paises como Japón, México y Estados Unidos, Asuka ha desarrollado una adaptabilidad a los diferentes estilos de lucha. Su repertorio en NXT es una combinación de castigos directos: sumisiones, patadas y suplexes. Desde su Asuka Lock (martillo al brazo con tijeras al cuerpo), luego el Ninja Armbar (agarre con giro que termina en palanca al brazo), también su Suplex Alemán y finalmente su Reverse Roundhouse (patada giratoria invertida), entre otros.
3- Revolución Femenina en construcción
Asuka llegó en el momento correcto. Con las principales exponentes de la revolución femenil subiendo a Raw y SmackDown, ¿quién podría ayudar a Bayley? Una Asuka salvaje apareció. Es muy efectivo. Asuka llegó para mantener el nivel de exigencia en la división femenina con rivales como Dana Brooke, Emma, Peyton Royce, Billie Kay, Cameron, Alexa Bliss y Bayley, que son las llamadas a mantener la revolución femenina e innovar, extender y continuar con el protagonismo que se vive en la marca amarilla para provocar un verdadero cambio en las marcas roja y azul. Asuka es la luchadora a la cual hay que alcanzar y de la cual pueden aprender más.
2- Su estilo
Vamos con su estilo de lucha, muy stiff, lo cual se traduce en el uso de golpes más directos y de contacto completo. De verdad se ve la agresividad y la competitividad. Si arriba hablabamos de su arsenal y su carisma, es su estilo de pelea el que termina de encerrar todo, dado que puede tener una lista de movimientos vistosos, pero que sin unos castigos acordes que los precedan y los apoyen, sería un tedio verla pelear. También no sirve de nada sólo tener carisma si se tiene un estilo nulo de pelea, para eso existen los no luchadores, parte del carisma de la nipona se debe a su actuación sobre el ring: sus golpes nos hablan de lo agresiva, desquiciada y competitiva que es. Algo así como la versión masculina de Dean Ambrose con quien tiene en común la expresividad facial y el estilo frenético y agresivo.
1- Anti Diva
Asuka no necesita anunciar en Twitter u otras redes sociales que va a ser la Anti Diva, ni mucho menos atacar verbalmente a las Total Divas.
Asuka con su carisma (expresividad, vestuario y entrada), su arsenal de movimientos contundentes, su papel e importancia en la revolución de gladiadoras y su estilo nada glamoroso ya es Anti Diva, una de las tantas Anti Divas de NXT que son más que vanidad. Su sola actuación en el ring ya es contrario a lo que se ha vivido años anteriores en la división femenina de WWE donde “la belleza” estuvo por encima del talento. Por eso Eva Marie desentona tanto en NXT.
Los fans lo saben, no son tontos; la división se renovó y demostró hasta donde puede llegar. Se puede decir que NXT ya nos acostumbró a ver a las luchadoras por su talento y no como mero objeto de deseo.