El jugador, de 36 años, explicó que le ofrecieron el pasado mayo volver al equipo holandés, pero descartó hacerlo como entrenador de la cantera o formando parte del equipo directivo.
“Si puedo hacer algo por el club, creo que el área donde puedo ser de mayor valor es en el césped”, dijo durante una rueda de prensa el zurdo neerlandés, que ha firmado un contrato de un año.
“Inicialmente estamos hablando de un intento de regreso, pero me siento bastante bien y creo que estamos en el camino correcto. Todavía debo dar algunos pasos más, pero tengo un muy buen presentimiento sobre el futuro”, indicó el exmadridista.
Así mismo, aseguró que vuelve al fútbol profesional porque se lo ha pedido el club que lo vio crecer. “Si otro equipo hubiera venido con una buena oferta, creo que no lo habría aceptado”, aseguró.
Respecto a su retirada en julio de 2019, cuando aún vestía la camiseta del Bayern Múnich, explicó que “se debió a algunos problemas físicos y fue una decisión más o menos forzada”, pero “los dolores y las molestias han desaparecido”.
“Apenas vi fútbol los primeros meses después de dejarlo en el Bayern y me vino bien, pero el fútbol me sigue pareciendo un deporte divertido y las ganas de jugar volvieron”, dijo.
La vuelta de Robben ha causado una gran expectación el Groningen, pues desde el anuncio de su regreso, hace menos de 24 horas, el club ha vendido 1.600 abonos para la próxima temporada. “Por supuesto, la diferencia de nivel con el Bayern Múnich es grande, pero lo hago por el equipo y espero poder divertirme”, indicó.
“Me siento muy en forma, estaba incluso entrenando para el maratón de Róterdam”, dijo en referencia a la prueba de fondo más importante de Países Bajos, cuya edición de este año fue aplazada a octubre por el coronavirus.