El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, deploró el martes que un inmigrante ilegal haya matado al jugador de futbol americano Edwin Jackson, y aprovechó para urgir a la oposición demócrata a reforzar la seguridad fronteriza.
"Tan vergonzoso que una persona ilegal en nuestro país matara al defensa de (los Indianápolis Colts), Edwin Jackson. Esta es solo una de muchas tragedias prevenibles", escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.
"Debemos lograr que los demócratas sean duros en la frontera, y con la inmigración ilegal, ¡RÁPIDO!", agregó.
So disgraceful that a person illegally in our country killed @Colts linebacker Edwin Jackson. This is just one of many such preventable tragedies. We must get the Dems to get tough on the Border, and with illegal immigration, FAST!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 6 de febrero de 2018
Jackson, de 26 años, murió en un accidente de tráfico el domingo, el mismo día del Super Bowl, la final del campeonato de la National Football League (NFL), la mayor liga de futbol americano de Estados Unidos.
Falleció luego de que una camioneta lo embistiera a él y al conductor del automóvil de Uber en que viajaba, Jeffrey Monroe, mientras ambos estaban parados al lado de una carretera junto al vehículo estacionado.
El sospechoso, que conducía ebrio, fue identificado como Manuel Orrego-Savala, de 37 años y oriundo de Guatemala.
Orrego-Savala, que inicialmente se presentó con el alias Alex Cabrera Gonsales, se encuentra en Estados Unidos ilegalmente, tras haber sido deportado en dos ocasiones: en 2007 y en 2009, dijo la policía del estado de Indiana (noreste) en un comunicado.
El sospechoso intentó huir del lugar del accidente a pie, pero fue arrestado poco después, señalaron los investigadores.
"Mis oraciones y mis mejores deseos están con la familia de Edwin Jackson, un joven maravilloso cuya vida fue tan absurdamente tomada", dijo Trump en un segundo tuit.
My prayers and best wishes are with the family of Edwin Jackson, a wonderful young man whose life was so senselessly taken. @Colts
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 6 de febrero de 2018
El mandatario, que ganó las elecciones con un fuerte discurso nacionalista, suele vincular a los inmigrantes ilegales con actos criminales.
Desde hace meses exige a los demócratas en el Congreso que aprueben fondos millonarios para construir un muro en la frontera con México, con el que asegura que mejorará la seguridad interna del país.
Más tarde el martes, Trump encabezará en la Casa Blanca una mesa redonda sobre la violenta pandilla de origen salvadoreño MS-13.
La MS-13, nacida en California pero muy activa en el llamado Triángulo del Norte centroamericano (El Salvador, Guatemala, Honduras), es invocada regularmente por Trump para señalar la necesidad de endurecer la política migratoria.