Robert Whittaker derrotó a Yoel Romero por decisión unánime de los jueces en el combate estelar del UFC 213, celebrado en Las Vegas, y se convirtió en campeón interino de peso medio (83, 9kg) de UFC.
El cubano Romero empezó presionando a Whittaker, quien consiguió con éxito evitar que el combate fuera a ras de lona. Aunque ambos conectaron golpes, el latinoamericano se mostró ligeramente más sólido.
En el segundo round, Romero logró tumbar al australiano, aunque este no le permitió trabajar desde la guardia. El cubano derribó nuevamente a su contendor, aunque no fue capaz de estabilizar la posición de control.
En el tercer asalto, Whittaker tomó la iniciativa y fue superior a Romero, sobre todo con sus patadas frontales al abdomen y el pecho, y puñetazos al rostro. También evitó todos los intentos de derribo que el cubano de 40 años intentó.
Aunque Romero pudo tumbar a Robert Whittaker en el cuarto asalto, no puedo dominarlo en el piso. El australiano de 26 años continuó con sus constantes patadas y puñetazos y complicó al ex luchador olímpico.
En el último round, Whittaker siguió buscando el intercambio de golpes y tomó la iniciativa, pero Romero –que sufrió un corte en el rostro– también conectó. El australiano terminó la pelea sobre Romero, castigándolo con una serie de codazos a la cara.
Al final, los tres jueces del combate dieron 48-47 a favor de Robert Whittaker, quien suma su octava victoria consecutiva en UFC y obtiene el cinturón interino. Ahora debe enfrentar al campeón Michael Bisping para unificar el título.