Harold Mayne Nicholls sigue acumulando problemas. El ex presidente de la ANFP, que está cumpliendo una sanción de tres años sin tener ningún cargo directivo, fue cuestionado por el “Informe García”.
El texto, que está a cargo del fiscal estadounidense Michael García, reveló una serie de irregularidas cometidas por el dirigente, las cuales se relacionan con el Mundial de Qatar 2022.
Entre otras cosas, se le acusó de querer conseguir beneficios para su familia y el gimnasta Tomás González, a través del Director de la Academia Aspire qatarí, Andreas Bleicher.
“¿Tienes la posibilidad de recibir en el nivel de fútbol a mi hijo Oliver que es delantero y a mi sobrino Nicolás que es arquero durante enero y febrero para verlos? Además, mi cuñado, antiguo jugador de Copa Davis, estuvo de vacaciones en Qatar un par de veces y él está realmente interesado en tener la posibilidad de ser técnico de tenis profesional en Qatar. ¿Puedo darle tu correo y le puedes informar sobre alguna posibilidad?”, fue el mail enviado por el chileno.
Respecto al atleta nacional, buscó su ingreso a la academia mediante una relación entre Aspire y Ganamos Todos, la fundación que tiene a cargo. La propuesta nunca llegó a buen puerto, porque no tuvo respuesta.
Mayne Nicholls está a la espera de la resolución del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), con la esperanza de que su castigo sea borrado, tras ser criticado por su abuso de poder y por no cumplir el Código de Ética del máximo organismo del fútbol mundial.