No es una afirmación gratuita decir que WWE está llevando cada vez más al límite el tema de la anticipación de sus combates. Si hace algunos años esto sólo ocurría en contadas ocasiones (caso del primer The Rock vs. John Cena), y de la mano de la propia compañía, hoy día la cobertura mediática no deja nada en el tintero. Así ocurrió el pasado marzo, cuando ni siquiera conociendo el cartel definitivo de WrestleMania 33, ya se dijo cuál sería el estelar de la próxima “Vitrina de los Inmortales”.
Brock Lesnar venció a Goldberg y Roman Reigns hizo lo propio con The Undertaker, los pronósticos del Wrestling Observer se cumplieron, y hasta ahora todo indica que el presagio es muy posible. “La Bestia Encarnada” y “El Tipo” mantienen por ahora unas rutas creativas que no los harían chocar hasta el 8 de abril del 2018 en Nueva Orleans. Una lucha de donde Reigns saldría consolidado como la nueva cara de la empresa y con el estatus de haber derrotado al mayor dominador de la historia reciente.
Pero el anuncio reciente del samoano en Raw quizá haya cambiado dichos planes. RR se declaró retador número 1 al Campeonato Universal WWE para SummerSlam (2017), sea quien sea el vencedor del Lesnar vs Samoa Joe de Great Ball of Fire. Dave Meltzer vuelve a pronunciarse en la última edición del WON, señalando que los planes hace dos semanas pasaban por un Braun Strowman vs. Lesnar por el máximo cetro de Raw en el gran evento del verano, tal y como recogió SÚPER LUCHAS.
Sin embargo, Meltzer añade que es probable que ahora esto se modifique debido a los pobres datos de audiencia que Raw está obteniendo, pues parece que la compañía empieza a darse cuenta que el calendario reducido del campeón está perjudicando los ratings semanales. Recordemos que Lesnar no ha disputado todavía su primera defensa, a pesar de que se comentó que durante esta etapa ejercería un rol de monarca más activo que el de su reinado de 2014-15, donde sólo concedió tres oportunidades por el título en 10 meses.
Así, Brock Lesnar vs. Roman reigns por el Campeonato Universal podría adelantarse para SummerSlam, PPV que WWE lleva promocionando desde hace algunos años como la segunda WrestleMania, y que con esta lucha, sin duda, cumpliría con la pretendida condición. Ya comprobamos el extenso cartel y consiguiente duración que tuvo la cita del pasado verano: 12 combates y más de 4 horas. Y es que Lesnar es el gran protagonista de las últimas tres ediciones, enfrentándose a Cena, Taker y Randy Orton. Un seguro de vida para llenar los asientos de cualquier recinto, bien sea el Staples Center de Los Ángeles o el Barclays Center de Brooklyn.
Evidentemente, Strowman saldría perjudicado de esta ruta creativa, pues un duelo con Lesnar en SS lo colocaría en la cima de la marca roja. Mientras, Reigns viviría otro nuevo paso de antorcha en apenas cuatro meses, suponiendo una victoria para él bajo dicho evento. Pese a quien pese, hace falta un revulsivo en el panorama de Raw, y Reigns es el “trending topic” de la compañía. Como dijo Kofi Kingston en una entrevista reciente, de eso trata WWE, de generar una reacción.