El Valencia quiere mirar al futuro con optimismo. Aunque el equipo aún debe dar un nuevo paso adelante para despegarse definitivamente de la zona baja de la tabla y poder acabar la temporada con renovadas ilusiones, la directiva ha comenzado a dedicar gran parte de su tiempo a la planificación del curso que viene, el que debe servir para poner fin a la triste trayectoria dibujada por la escuadra en los últimos cursos.
Con este objetivo, el exjugador ché y actual integrante de la secretaría técnica, Vicente Rodríguez, se tomó la molestia de viajar el pasado lunes hasta tierras andaluzas para presenciar en directo el choque que medía al Málaga con la UD Las Palmas y así poder observar con detenimiento a dos jugadores que resultan del agrado de los técnicos: el lateral zurdo Dani Castellano (29 años) y el centrocampista Ignacio Camacho (26).
El fichaje del primero resulta sin duda interesante tanto por el buen rendimiento que viene ofreciendo desde que asaltó el primer equipo insular como por el hecho de que acaba contrato el próximo 30 de junio y podría recalar en Mestalla sin coste alguno. El canario vendría a ocupar la plaza de un Guilherme Siqueira que tiene las horas contadas y a estimular la competitividad de un José Luis Gayá cuya progresión se ha frenado considerablemente esta campaña.
La contratación del segundo responde, por su parte, al deseo de mejorar las prestaciones de una medular que ha ofrecido un rendimiento muy pobre a lo largo del presente curso. En invierno, los valencianistas ya tantearon su incorporación, pero la oferta de más de 12 M€ fue rechazada de plano por un cuadro malagueño que se aferra con fuerza a los 18 M€ de su cláusula de rescisión.