En noviembre pasado, previo a jugar a un partido ante los 49ers de San Francisco, el quarterback de los Patriots de Nueva Inglaterra, Tom Brady, dejó en claro que no se veía dentro de la misma categoría que su ídolo de niño, el legendario Joe Montana, pese a que muchos lo situaban a lado o arriba de él.
“Nunca me he visto como él”, dijo Brady, quien creció en el área de la Bahía en San Mateo siguiendo a los 49ers de San Francisco. “Fue muy espectacular y creo que está en otro nivel. Es un ganador… cada vez que pisaba el campo, sentía que el equipo iba a ganar”.
Ahora, gracias a su actuación en el pasado Super Bowl, donde guió a los Patriots a una remontada histórica de 25 puntos sobre los Falcons de Atlanta para conquistar su quinto campeonato y así convertirse en el mariscal más ganador del gran juego, Brady está siendo vitoreado como el mejor quarterback de todos los tiempos por encima del propio Joe Montana.
Pero aunque TB12 tiene más anillos, la carrera de “Joe Cool” no se queda atrás. Ambos cuentan con varios puntos a favor y en contra que hacen que el debate sobre quién es el más grande no tenga fin.
Aquí ofrecemos algunos argumentos para añadir más contexto al asunto.
Tom Brady
PUNTOS A FAVOR
Números en total
Tras 17 temporadas en la liga, Brady tiene una marca de 183-52 en juegos de la campaña regular y 25-9 en la postemporada. “Joe Cool” registra récords de 117-47 y 16-7 a lo largo de 16 años en la NFL, 14 con San Francisco y dos con los Chiefs de Kansas City.
Brady también ha encontrado la zona de anotación más veces (456 en temporada regular y 63 en playoffs) a comparación de Montana (273 y 45).
Más longevidad
A los 39 años y pese a perderse los primeros cuatro partidos debido a una suspensión, Brady tuvo la mejor ratio de touchdowns e intercepciones de la liga (28 a 2). Montana tuvo una ratio combinada de 29 a 16 en sus dos últimos años. Dijo adiós a los emparrillados a los 38 años de edad, lejos de su mejor nivel.
Sin un gran reparto
Brady nunca ha contado con armas de lujo en sus triunfos de Super Bowl. El tight end Rob Gronkowski es el único jugador de peso con el que TB12 ha ganado un campeonato, el Super Bowl XLIX. Otros como Deion Branch y Wes Welker fueron elementos sobresalientes pero no de elite.
PUNTOS EN CONTRA
No ha sido muy determinante
Antes de su desempeño en la remontada ante los Falcons en la cual estableció la marca de más yardas lanzadas en un Super Bowl (466), Brady no había tenido una actuación categórica y clave en el gran juego pese a haber sido nombrado el Jugador más valioso en tres ocasiones. En 2002 y 2004 los Patriots dependieron de un gol de campo para vencer a los Rams de San Luis y a los Panthers de Carolina, respectivamente. En 2005 ante los Eagles de Filadelfia, la unidad defensiva brilló más que Tom Brady. Y hace dos años, el debacle de los Seahawks en la línea de anotación en la última jugada del partido dio más de que hablar que el propio mariscal.
Empañado por la trampa
Parece que en la era de Brady con los Patriotas dos cosas han ido mano en mano: el éxito y la controversia. Varias veces Nueva Inglaterra ha sido acusada de hacer trampa para sacar ventaja. El primero en alzar la voz fue el corredor de los Rams Marshall Faulk, a quien se le hizo sospechoso que el entrenador de los Patriots, Bill Belichick, pudo identificar jugadas que San Luis jamás había usado antes del Super Bowl XXVI. En 2007 tras años de ser acusados por muchos equipos de espionaje, los Patriotas finalmente fueron disciplinados por la liga gracias al caso “Spygate”, en el cual se les declaró culpables de ilegalmente grabar entrenamientos de los Jets de Nueva York para obtener información sobre formaciones y señales de jugadas. Y en el Juego de Campeonato de la Conferencia Americana de 2015 ante los Colts Indianápolis, en el caso “Deflategate”, se comprobó que Nueva Inglaterra había intencionalmente desinflado sus ovoides para que Brady tuviera una ventaja en sus pases.
Joe Montana
PUNTOS A FAVOR
Más efectivo en el gran juego
Brady puede tener más anillos (5), pero Montana ha sido más eficaz. “Joe Cool” ganó todos los cuatro juegos de Super Bowl que disputó en su carrera, mientras que Brady tiene una marca de 5-2. En total en sus apariciones, Montana consiguió 11 touchdowns con 1,142 yardas lanzadas en 83 pases completados, y lo hizo sin ser interceptado. Su índice de pasador fue de 127.8. Brady tiene 15 touchdowns con 2,071 yardas lanzadas en 207 envíos conectados, y cuenta con cinco intercepciones. Su índice de pasador es de 95.3.
Noches épicas
Montana tiene bajo su nombre dos actuaciones legendarias de Super Bowl. En 1989, contra los Bengals de Cincinnati, abajo 16-13 con menos de cuatro minutos por jugar, el mariscal ingenió una trepidante serie ofensiva que atravesó 92 yardas en 11 jugadas. Al final, encontró a John Taylor para el touchdown de la victoria. Un año más tarde, ante los Broncos de Denver, Montana orquestó un sublime desempeño. En los tres primeros periodos lanzó cinco touchdowns.
Triunfó en una era más difícil
No hay duda que en los tiempos de Montana, la década de los 80, el futbol americano era más complicado para los mariscales pues las defensas se basaban más en el aspecto físico que el táctico. También las reglas no los protegían mucho; con el ovoide en juego, estaban sujetos a cualquier tipo de impacto. Brady no ha sido abusado como lo sí lo fue Montana en su tiempo.
PUNTOS EN CONTRA
No tan constante
Desde que Brady tomó las riendas de la ofensiva de los Patriots en 2001 jamás ha tenido una temporada con récord perdedor. En la única campaña, la de 2002, que el equipo no accedió a los playoffs de la mano TB12, terminaron con una marca de 9-7. El quarterback ha ido a 11 Juegos de Campeonato de Conferencia, actualmente lleva una racha de seis al hilo. Montana tuvo tres temporadas negativas. Solo jugó en siete Juegos de Campeonato de Conferencia, seis con los 49ers y uno con los Chiefs.
Mucha ayuda
Aunque Montana era el jefe de San Francisco, contaba con un elenco que le facilitó las cosas. A su costado tenía al corredor Roger Craig, quien en 1988 fue nombrado el mejor jugador ofensivo de la NFL. Le mandó pases de touchdown al que es considerado el mejor receptor de todos los tiempos, Jerry Rice. También gozaba de unidades defensivas entre las 10 mejores de la liga. Las cuatro veces que los 49ers fueron al gran juego con Montana, tenían unidades defensivas que estaban dentro de la 10 mejores de la liga. Todas fueron lideradas por el temible safety Ronnie Lott, miembro del Salón de la Fama.