Las autoridades municipales votarán el martes en torno a la propuesta de construir un estadio para que los Raiders de Oakland se queden en la ciudad.
El proyecto, de mil 300 millones de dólares, será sometido a votación por la junta del condado de Alameda y el concejo municipal de Oakland. De aprobarse la iniciativa, la municipalidad podrá negociar un acuerdo formal para construir el estadio, a un costo de 1.300 millones de dólares incluyendo 350 millones por concepto de tenencia de tierras y futuras ganancias.
Hace pocos meses el propietario del equipo Mark Davis anunció que trasladaría a los Raiders a Las Vegas, donde ya se aprobó la construcción de un estadio a un costo de 1.900 millones de dólares. Pero la alcaldesa de Oakland Libby Schaaf está insistiendo en una contrapropuesta para que los Raiders se queden en el Oakland Coliseum.
"Si no lo hacemos, perdemos la oportunidad, se acaba el juego", dijo Jim Zelinski, cofundador de Save Oakland Sports, una organización sin fines de lucro que aboga por mantener en la ciudad a los Raiders y a otros equipos deportivos.
No es cosa segura que el equipo se traslade a Nevada aunque es posible que la NFL vote en torno al tema en enero. Nevada recaudará 750 millones de dólares a partir de un impuesto a los hoteles a fin de financiar el estadio, mientras el magnate de los casinos Sheldon Adelson contribuirá 650 millones de dólares y los Raiders y la NFL 500 millones.
Para concretar el traslado, los Raiders tendrían que conseguir la aprobación de 24 de los 32 propietarios de equipos de la NFL.
Los Raiders podrían también mudarse a la zona de Los Angeles, donde compartirían las instalaciones con los Rams.