Toro Rosso ha tenido una segunda parte de la temporada complicada. Desde el Gran Premio de Alemania apenas acumula dos puntos, del ruso Daniil Kvyat, quien fue noveno en Singapur; el resto ha sido pelear por detrás del Top 10, e incluso sufrir algún retiro.
El español Carlos Sainz lo ha padecido, tras sumar en ocho de las primeras 11 carreras del año, se ha estancado a partir de Hungría, y no prevé que la situación cambie para el resto del 2016, incluido este fin de semana en Austin.
“En estos cuatro Grandes Premios que quedan la meta es muy simple, sacar el máximo rendimiento del coche, me da igual que ocupe el puesto 12 o 15, y divertirme, al final soy piloto de Fórmula Uno, tengo un contrato firmado para el año que viene, soy de los que tienen garantizado eso, y puedo disfrutar estas últimas carreras en las que no estaré luchando donde me gustaría, pero por lo menos me voy a divertir”.
El ibérico, que el año pasado fue séptimo en Austin, en una carrera en la que los Toro Rosso terminaron en el Top 10, con un cuarto lugar de Max Verstappen, sabe que será difícil obtener unidades, “sí, muy complicado, parecido a lo que vieron en Malasia y Japón”, señaló, en referencia a los últimos Grandes Premios donde fue 11 y 17, respectivamente, mientras que Kvyat terminó 14 y 13.
Para el nacido en Madrid hace 22 años, la situación no variará demasiado en México, aunque espera que la escudería tenga conclusiones respecto a lo ocurrido en el primer año en el Autódromo Hermanos Rodríguez y pueda corregir los errores el próximo fin de semana.
“La altitud fue el mayor de nuestros problemas, tuvimos que correr casi toda la carrera sin baterías, con problemas en los frenos, así que espero que este año hayamos aprendido la lección, sepamos que México es el circuito más duro en la mecánica, y lleguemos bien preparados”.
Ante rumores de un posible cambio a Renault o incluso a Ferrari para 2017, Sainz fue confirmado temprano en la temporada por Toro Rosso como uno de sus titulares para el siguiente año; no obstante, Carlos mantiene la ilusión de crecer en la máxima categoría a mediano plazo.
“A futuro mi objetivo es hacer un buen 2017 y a partir de ahí ya veremos, si Red Bull me quiere, será un honor, y si no, hay que asegurarse de tener carrera en la Fórmula Uno y lo he dicho, me gustaría ir a un equipo oficial”.
OMCS