En el mundo del fútbol, los titulares pueden llegar a ser tan impredecibles como un partido en tiempo de descuento. Y esta vez, la noticia ha irrumpido desde el ámbito más inesperado: las redes sociales. Dani Alves (40 años) ha vuelto a hacer ruido en el universo digital tras más de un año y dos meses de ausencia en Instagram. Pero su regreso no ha sido precisamente para compartir fotos de entrenamientos o momentos de ocio. No. Alves ha optado por lanzar un mensaje contundente, una especie de advertencia entre líneas, desmintiendo las recientes especulaciones mediáticas que rodean su vida personal.
El brasileño, quien se encuentra en libertad provisional mientras se resuelven los recursos contra una condena a cuatro años y medio de cárcel por violación sexual, ha negado rotundamente haber concedido entrevistas a cualquier medio de comunicación. Su reaparición en Instagram ha sido breve pero intensa, acompañada de una imagen borrosa que parece apuntar más al contenido del mensaje que a la fotografía en sí misma.