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El agente, de 31 años, fue hospitalizado con una herida en el muslo que le provocó una importante hemorragia tras recibir el impacto de una bengala y los médicos le amputaron la pierna con la esperanza de poder salvarle la vida.
Un joven de 18 años fue detenido acusado de ser el autor del lanzamiento de la bengala contra la policía tras el derbi disputado por Olympiacos y Panathinaikos el pasado 7 de diciembre.
Tras este nuevo incidente violento que gangrena el deporte griego desde hace años, y especialmente el fútbol, el gobierno anunció que todos los encuentros del campeonato de fútbol se disputarían a puerta cerrada hasta el 12 de febrero.
El ejecutivo también anunció otras medidas para luchar contra la violencia, como la instalación de cámaras de seguridad de alta definición en todos los estadios, así como sistemas de entrada electrónicos con identificación de los espectadores.
Este último caso también provocó la dimisión del presidente de la Liga Griega de Fútbol, Vangelis Marinakis.