Afectados por una enfermedad catastrófica y una crónica Manuel Carmenate y Carlos Morales no solo coinciden en tener afecciones graves, sino que además ambos son entrenadores de karate do. Y las coincidencias no terminan: ambos cobraron por última vez sus sueldos en diciembre del 2019, contaron a este Diario. Hoy le piden a la Secretaría del Deporte el pago de sus haberes para subsistir durante la emergencia sanitaria decretada por el Gobierno, debido al coronavirus.
Con un diagnóstico de inmunodeprimido, por las quimioterapias y radioterapias a las que fue sometido para contrarrestar un cáncer de colon, Carmenate urge de su emolumento no solo para tener una mejor alimentación que le ayude a elevar las defensas, sino para comprar medicinas que le mantienen estable.
“Sé que las medidas del Gobierno de que no salgamos de casa para evitar la propagación del virus es lo mejor. Igual soy consciente de que el Estado hoy tiene la prioridad de velar por la salud de todos, pero no es justo que a entrenadores y personal administrativo de unas 16 federaciones provinciales no nos hayan pagado cerca de tres meses”, indicó el cubano, que es entrenador en la Federación Deportiva de Cotopaxi.
Orgulloso de tener a esta provincia en los primeros lugares del karate do a nivel nacional, Carmenate contó que pese a las restricciones él sigue con sus enseñanzas a los deportistas a través de las redes sociales. Mas, pidió a la Secretaría del Deporte que agilite el pago de los sueldos porque caso contrario, incluso, su vida corre peligro al ser inmunodeprimido.
Nos piden no salir por el virus, pero cómo subsistimos si solo nos pagaron hasta diciembre y luego no hemos visto ni un centavo. Carlos Morales, entrenador de karate
En total son 52 los afectados en la Federación de Cotopaxi entre personal administrativo, entrenadores y metodólogos, contó Carmenate.
El próximo domingo Carmenate cumplirá 59 años, uno de los onomásticos “más tristes”, dijo, sin dinero, solo (su familia está en Cuba) y lo peor sin poder compartir con sus amigos y alumnos, quienes de seguro, indicó, le habrían celebrado si no hubiera la emergencia.
La historia de Carlos Morales (51 años), entrenador de karate do de la Federación Deportiva de Los Ríos, no dista de la del caribeño. Tiene que afrontar una cirrosis, enfermedad crónica que es tratada en los centros médicos del Seguro Social, pero, contó, que la medicina que le proveen son solo paliativos y que él para tener un mejor estilo de vida debe comprar más medicamentos.
“Todos los años guardamos reservas económicas porque sabemos que siempre se atrasan en el pago a inicios de año, pero en este ya se acabó todo lo guardado”, indicó Morales.
“La culpa es del Ministerio de Economía y Finanzas y de la Secretaría del Deporte. Esta última no agilita nada y tampoco le importa el drama que vivimos los más de 100 empleados de Los Ríos”, indicó.
Aparte de sus gastos, Morales, contó, tiene un hijo menor de 11 años por el cual debe velar junto a su pareja, de la cual está separado. (D)