Golovin marcó el 1-0, a pase de Cesc Fábregas, en el minuto 29 y, cuando el empate de Burner en el 54 para el Niza había intensificado de nuevo la inquietud del Mónaco, anotó el 2-1 para decidir el partido, sentenciado con el 3-1 en el 80 del exsevillista Ben Yedder, que anotó su cuarto gol en cinco duelos del curso. La asistencia fue de Golovin.
Ese triunfo impulsó fuera del descenso a su equipo, de momento de manera provisional, pendiente del marcador entre el Saint Etienne y el Metz del miércoles.
Para el Niza fue una derrota frustrante. Y una ocasión perdida. Porque no pudo acercarse al París Saint Germain, el líder de la tabla, y porque malgastó la opción de ser segundo para caer al cuarto puesto, superado incluso por el Marsella, que enlazó su segundo empate.
Igualado la pasada jornada en el Velodrome por el Montpellier, el Marsella salió este martes de la casa del último clasificado, el Dijon, sin goles, con un empate y con un punto que pone en alerta al equipo, que se quedará a seis puntos del PSG si gana el miércoles al Reims.
Además del conjunto parisino, también jugará este miércoles el Angers, segundo y que visita al Toulouse. El resto de partidos, también el miércoles, serán Amiens-Burdeos, Brest-Lyon, Lille-Estrasburgo, Montpellier-Nimes, Nantes-Rennes y Saint Etienne-Metz.